Tula no entregará comodato de estación del tren a FNM
Ya me harté de ver los robos a la Nación, de ver a la corrupción y a la impunidad como una condición endémica y sistémica de este país…
Ya me harté de los gobernantes que viven cómodamente del presupuesto en vez de aportar a éste y más harto estoy de un presidente incapaz que, cada vez, pierde más credibilidad…
Ya me harté de vivir en un lugar en donde no existe una política pública que fomente la productividad y la generación de riqueza; de ver los escasos esfuerzos de los políticos de carrera en mi estado quienes, además, viven como reyes sin haber generado un peso por su esfuerzo ético y decente. Ya me harté de ver como andan brincando de puesto en puesto para seguir viviendo de la burocracia.
Ya me harté de sentir impotencia ante las autoridades que buscan oprimir y exprimir a las empresas para llegar a sus cuotas de recaudación y, encima, de ver que las leyes en nuestro país atentan contra éstas y sus trabajadores. Ya me harté de ser parte del 30% de la economía formal que mantiene al 70% de la economía informal.
Ya me harté de empresarios que se hacen ricos de la noche a la mañana con jugosos contratos con gobierno, sin siquiera cumplir con sus obligaciones fiscales y sociales…
Ya me harté de los grupos de poder, que sólo buscan no cumplir o evadir la ley.
Hoy, todos los ciudadanos decentes, trabajadores y comprometidos con su entorno, estamos hartos de escuchar los atropellos, los insultos a nuestra inteligencia, las farsas, los conflictos de intereses, la violencia… la lista sigue y sigue…
Hago un llamado a todos los ciudadanos a quienes, como yo, estamos hartos.
¿Cómo?
Señala sin miedo a represalias, levanta la voz, exige, manifiesta tu inconformidad y tu decepción.
Súmate a los miles de mexicanos que estamos levantando la voz y así, los políticos ante esa presión, comenzarán a adelgazar la piel y escucharan éstas exigencias y actuarán en consecuencia.
Será una lucha sin cuartel, pero te aseguro que el bien colectivo triunfará ante el mal de grupos de poder.
Soy Javier Vázquez Coria, mexicano, hidalguense, empresario y padre de familia…tan imperfecto como cualquiera pero sin cola que me pisen y no tengo miedo, ¡tengo hartazgo!
Amo profundamente a este país y, por ello, no he perdido la fé en él y nunca lo haré.
Como ciudadano, aspiro simplemente a formar a mi familia y colaboradores en valores para dejarles un mejor país del que yo recibí.
¡Simplemente ya me harté!
Si estás de acuerdo conmigo y compartes mi postura, alcemos la voz juntos. Empecemos a cambiar a México, ayúdame a compartir y difundir este mensaje».