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TULA DE ALLENDE, Hgo., 31 de marzo de 2015.- «O el gobierno estatal falla a nuestro favor en el conflicto por la posesión de más de 200 hectáreas en el cerro El Gavilán que nos disputamos desde hace varios años con labriegos de Tlahuelilpan o las recuperaremos como sea, aun por la vía armada».
Así lo advirtieron la mañana de este martes cerca de 80 comuneros del ejido de Doxhey, en representación de un núcleo integrado por más de 250 ejidatarios; demandaron el desalojo inmediato de sus tierras de la gente de Tlahuelilpan, “o las echaremos nosotros mismos cueste o que cueste”.
Encabezados por Nicolás Mendoza, presidente del Consejo de Vigilancia del ejido, dieron un ultimátum al gobierno del estado para que falle a su favor y les restituya las 200 hectáreas que legítimamente les pertenecen.
Los ejidatarios de Doxhey se dijeron asistidos por la razón y el derecho, ya que con documentos en mano, dieron cuenta de una resolución emitida por tribunales agrarios que avala que las tierras en disputa les pertenecen, “siendo que Tlahuelilpan no tiene nada”.
Advirtieron que si el conflicto llega a mayores será responsabilidad del gobierno del estado, ya que históricamente han mostrado su falta de capacidad y tacto político para resolver el añejo conflicto, “donde puede derramarse mucha sangre e incluso haber pérdida de vidas”.
Por otra parte los disidentes se quejan de que la gente de Tlahuelilpan no ha respetado los acuerdos que se firmaron el 26 de mayo de 2012, en los que se estipula que ninguno de los bandos que disputan las tierras del Gavilán, puede intervenir sobre las tierras en pugna.
“Pero los ejidatarios de Tlahuelilpan ya hasta están construyendo en el cerro, mediante el apoyo del alcalde Jaime Moreno Contreras, quien está prestando maquinaria de la alcaldía para cimentar casas habitación sobre las tierras en conflicto”.
Los denunciantes adelantaron que mañana (miércoles), a la una de la tarde, sostendrán una reunión con el subsecretario de gobierno a fin de obtener una resolución definitiva, y advirtieron que si no es favorable a su causa, entonces vendrán las consecuencias.
Lo anterior porque indicaron que ya están hartos de actuar pasivamente, de que las autoridades le den vueltas al asunto, de que les digan que mantengan la calma, mientras que la gente de Tlahuelilpan continúa invadiendo sus propiedades, cerraron.