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TOLUCA, Edomex, 17 de abril de 2015.- Ducharte es algo que haces varias veces por semana, pero todo ese jabón, espuma, champú y bálsamo, le puede estar haciendo un gran daño a tu piel.
EL AGUA CALIENTE:
Podrás pensar que una ducha de agua caliente al vapor es un bien terapéutico mediante la relajación muscular, sin embargo un dermatólogo te dirá que «el agua caliente es mala por dos razones», dice Cynthia Bailey, MD, una dermatóloga en el norte de California y fundadora del DrBaileySkinCare.com. «En primer lugar, elimina demasiado tus aceites naturales. En segundo lugar, el agua caliente trae la circulación sanguínea a la piel por lo que tu piel se pondrá roja como una langosta. Con la circulación vienen bloques inflamatorios de construcción para crear más picazón e incluso una erupción. El «Dr. Bailey informa que la temperatura del agua debe estar tibia, es decir, como la temperatura de la piel o simplemente un poco más caliente, sobre todo si tienes una piel frágil que sea propensa a la sequedad.
DUCHARSE POR DEMASIADO TIEMPO:
Entre el vapor, el agua cayendo, y el calor, es tentador pasar 15, 20, o incluso 30 minutos en la ducha, pero muchos expertos dicen que algo más de 10 minutos es demasiado. «No debes ducharte durante más de 5 a 10 minutos,» dice el Dr. Farris. «entre más corto, mucho mejor.» Los duchazos largos dejan tu piel llena de humedad.
ENJABONAR TODO EL CUERPO:
El jabón está formulado para disolver la suciedad y el aceite, permitiendo que el agua remueva entonces la suciedad. La piel de los brazos y las piernas generalmente no tiene una gran cantidad de aceite, por lo que la limpieza con jabón es como sacar agua de un hueso seco, lo que hará que esas zonas de tu piel queden más secas. «Minimiza el enjabonado sólo a las zonas grasosas y que causan el olor de tu piel: como la cara, las axilas, las nalgas, la ingle y los pies», dice el Dr. Bailey.
ESPERAR DEMASIADO TIEMPO PARA HUMECTAR LA PIEL:
Los dermatólogos están de acuerdo, tres es el número mágico. Esperar más de tres minutos después de salir de la ducha para hidratar la piel, hace que el aire le robe cierta humedad valiosa. El protocolo adecuado de hidratación: Después de salir de la ducha, quita suavemente el exceso de agua de tu piel, dejando algunas gotitas.
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