PACHUCA, Hgo., 5 de mayo de 2015.- La medicina prehispánica utilizó en el pasado una extensa variedad de plantas medicinales, sustancias y partes de animales para curar enfermedades, por lo que se le considera un sistema de salud rico en conocimientos, resaltó el investigador Carlos Viesca Treviño.
El especialista de la Facultad de Medicina de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), explicó que las heridas hechas por lanza en el tórax eran suturadas con cabellos, lo que demuestra que conocían la manera de cómo evitar el colapso pulmonar, pero el logro más “impresionante” es la colocación de ramas de ocote tratadas con miel en la cavidad intramedular de fémures fracturados.
Viesca Treviño detalló que la medicina prehispánica se basaba en mantener el equilibrio entre los órganos internos y los agentes externos, pues esta medicina identificaba con mucha claridad las causas de las enfermedades.
“No existía una anatomía ni descriptiva, ni topográfica, como se esperaría desde un punto de vista occidental, sino una anatomía estructural en la que las relaciones enmarcan partes del cuerpo, sus funciones, reales o supuestas, y sus correlaciones con los astros y cuerpos celestes”, puntualizó.
Tras analizar las enfermedades consideradas por los médicos náhuatl prehispánicos, su forma de entenderlas y ordenarlas, Viesca Treviño comentó que se trata de un esquema multiaxial, donde por una parte se ubican las relaciones causales, por otra las partes del cuerpo afectadas y, en otra más, la alteración de las funciones.
Así, al igual que su sistema clasificatorio de enfermedades, el experto resaltó que la medicina prehispánica, específicamente la náhuatl, tenía conocimiento profundo de los recursos curativos que se encontraban en los territorios que habitaban.
El investigador agregó que estos grupos también desarrollaban técnicas complejas que comprendían rituales mágicos y religiosos, así como osadas intervenciones quirúrgicas.
El también integrante de la Academia Mexicana de las Ciencias (AMC) subrayó que el tratamiento médico siempre estuvo orientado a curar de manera integral las causas y los síntomas, y tras identificar el origen de las enfermedades se suministraban los medicamentos.