Atrapan Los Dodgers octava Serie Mundial pese a 3 jonrones de los Yankees
MÉXICO, DF, 27 de mayo de 2015.- Charles Gordon ‘Chuck’ Blazer nació en Nueva York el 26 de abril de 1945. Sagaz para advertir nichos de negocios, comenzó desde muy joven a trabajar en la liga de fútbol de los Estados Unidos hasta convertirse primero en secretario general de la Concacaf (Confederación del Norte, Centroamérica y Caribe), cargo que desempeñó entre 1990 y 2011, y luego en miembro del Comité Ejecutivo de la FIFA, organismo al que llegó en 1996, publica el portal de noticias argentino Infobae.
En 2013 su nombre saltó a las primeras planas de los medios de comunicación cuando el organismo lo suspendió durante 90 días bajo sospecha de aceptar sobornos millonarios.
El dirigente había sido denunciado en 2011 por el periodista Andrew Jennings, quien en el diario The Independent adelantó que el FBI estaba detrás de depósitos de más de 20 millones de dólares relacionados con el fútbol, realizados a cuentas que Blazer operaba en el extranjero.
La crónica del escándalo que este miércoles explotó en las manos de la FIFA comenzó a mediados de 2014 cuando el ex fiscal americano Michael Garcia presentó un informe sobre el proceso de adjudicación de las sedes de los Mundiales 2018 y 2022 asignados a Rusia y Qatar respectivamente, que había sido solicitado por el máximo organismo.
El documento, de 350 páginas, daba cuenta de distintas irregularidades surgidas a partir de la consulta a más de 75 testigos y del análisis de distintas entrevistas y cintas de audios.
El informe del escándalo fue analizado por el presidente de la Cámara de Decisión del Comité de Ética de la FIFA y su presidente, el juez alemán Hans Joachim Eckert, intentó desactivar la bomba cuando argumentó, antes de dar el caso por cerrado, que «no se observó ninguna violación o incumplimiento de las normas y reglamentos correspondientes» pese a que también dijo en su manifestación pública que notó irregularidades en casi todas las candidaturas, las que sin embargo, consideró, no influyeron en la decisión final.
Esta desautorización pública desató la ira de Michael Garcia, quien expuso más tarde la «falta de transparencia» en el análisis de su informe e instó a la FIFA a publicarlo en su totalidad.
Aquí, más información: http://www.infobae.com/2015/05/27/1731347-chuck-blazer-el-topo-que-delato-la-corrupcion-la-fifa