Terminan actualización de Atlas de Riesgo de Tulancingo

TULANCINGO, Hgo., 12 de junio de 2015.- Acciones para mitigar riesgos de hundimientos de territorio, rutas para oleiductos o gaseoductos, es parte de lo que contiene la actualización del Atlas de Riesgo en el municipio.

El secretario de Desarrollo Urbano, Marco Vera Flores, dio a conocer que esta herramienta preventiva e informativa está concluida y será en este mes cuando autoridades municipales la presenten de manera oficial a los habitantes del municipio, pero principalmente a delegados y comités vecinales de Protección Civil.

El tema se trató con la secretaria general municipal, Seguridad Ciudadana y Desarrollo Urbano, para que en esa coordinación institucional, se refuerce el sistema de planeación municipal, el cual incluye el programa de Desarrollo Urbano municipal, como el centro de población imparciales, plan de acción climática y el ordenamiento ecológico territorial.

Con estas acciones, Tulancingo será el único municipio en la entidad que tendrá un sistema de planeación municipal completo, precisó Vera Flores.

Recordó que la inversión para la actualización del Atlas de Riesgo fue de 800 mil pesos del ejercicio fiscal 2014.

Entre los resultados destacó riesgos de hundimientos de territorio, no solo en la comunidad de Santa Ana Hueytlalpan, sino en la parte de la Rojo Gómez, aunado a las características geológicas que presenta la zona, esto para no permitir el crecimiento urbano.

El hundimiento, indicó que se da por la explotación de los mantos acuíferos.

También se indican zonas como La Cañada y Huapalcalco, en las que se deben tener  acciones direccionadas para tener un sistema de monitoreo electrónico que  les permita estar al tanto de cualquier movimiento que se suscitara y realizar la evacuación, esto por las grandes rocas que hay en las laderas.

En Tulancingo, no pasa algún oleiducto o  gaseoducto, sin embargo, es propenso con la nueva  política de Pemex, y ya se tienen algunas peticiones para que líneas pasen y crucen el territorio.

“Gracias a esta información, pudimos determinar lo que podría ser en su momento la ruta de un oleiducto sin poner en riesgo  zonas ya habitables o próximas en crecimiento urbano”, finalizó.