
Fue la emoción: se justifican y disculpan por no ver a Sheinbaum
CIUDAD DE MÉXICO, 14 de abril de 2017.- Después de pasar la noche en la cárcel, Jesús de Nazaret fue llevado a través de las calles de Iztapalapa ante el gobernador romano Poncio Pilatos para ser juzgado.
Su delito: decir que es el Hijo de Dios “Justicia, justicia, la Cruz para el nazareno”, gritan los sacerdotes de Sanedrín, quienes hacen escarnio del origen humilde de Jesús, hijo de José, un carpintero.
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