
Accidente en la México-Tuxpan deja 3 muertos y 3 lesionados
PACHUCA, Hgo., 13 de febrero de 2018.- Las quejas interpuestas por el mal actuar de las instancias de seguridad, procuración de justicia y defensa nacional en Hidalgo se incrementaron por lo menos en 45 por ciento desde 2015, en el que se denunció una actuación propensa cada vez mayor de estas autoridades a la aplicación de tortura y hasta de la privación de la vida.
De acuerdo con el registro del Sistema Nacional de Alerta de Violación a los Derechos Humanos las quejas de la ciudadanía en el actuar de la Procuraduría General de Justicia (PGJ), la Policía Federal (PF), la Secretaría de la Defensa Nacional (SEDENA) y hasta del Instituto Nacional de Migración (INM) tuvieron un aumento considerable entre la población hidalguense al registrar tan sólo de enero a diciembre de 2017 un total de 29 protestas.
La anterior cifra representa un incremento en consideración de 2015, año en el que se interpusieron 20 quejas contra estos entes de seguridad ante la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), mientras que en 2016 las quejas llegaron a 15, lo cual actualmente es un alza del 45 y 93.3 por ciento respectivamente.
Parte de la gravedad además del incremento en las estadísticas de un año a otro, es la constante de la aplicación de la tortura como método dentro del actuar de estas autoridades, principalmente en la PGJ y la PF, quien en 2017 se denuncian 4 de estos actos dentro de las quejas y que desde 2015 suman 10 hechos violatorios de este tipo, sin que al momento la CNDH determine la existencia de esta práctica.
De acuerdo con las quejas, los lugares donde se empleó presuntamente la tortura fueron en Pachuca, Tulancingo y Atitlaquia en 2 ocasiones respectivamente, una en Huejutla y 3 señaladas como sin datos de la ubicación.
Una de las cuestiones que también resalta es la mención del hecho violatorio de la privación de la vida en uno de los actos denunciados, éste en una acción señalada de irregular por la Policía Federal, ubicado en Ixmiquilpan, derivado de las muertes de 2 manifestantes durante el movimiento contra el gasolinazo ocurrido en enero de 2016.
Por parte de la SEDENA se observa un gradual aumento de las quejas contra este cuerpo castrense y si bien no se exponen casos de tortura en su desempeño, sí resalta la intimidación como método en su quehacer, así como la retención ilegal.
Por parte del INM no hay presencia de estos actos de tortura, privación de la vida, intimidaciones o amenazas, sin embargo su actuar irregular se refleja en la incomunicación de migrantes y la errónea aplicación de las leyes en la materia, lo que vulnera sus derechos fundamentales plasmados en la Constitución y los tratados internacionales firmados por México.
Lo que también se mantien como prácticas que vulneran los derechos humanos y que se documenta en las quejas ocurridas en Hidalgo son la presencia de tratos humanos y degradantes, vicios en el proceso de detención, pésimo empleo de las facultades de las autoridades en el desempeño de sus actos, entre otros, mismos que parecen ser el día a día de sus actos.