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PACHUCA Hgo., 6 de agosto de 2018.- El Congreso del Estado de Hidalgo negó que las acciones legislativas aprobadas en últimas fechas sean apresuramientos o “albazos” además de que los elementos de seguridad que estuvieron ese día resguardando las instalaciones no portaban armas de fuego, sino equipamiento de contención.
En comunicado oficial en respuesta de lo que se comentó este día en el Senado de la República por diputados locales, federales y senadores electos de Morena quienes denunciaron los actos de represión a los que fueron sometidos el pasado martes 31 de julio en el cierre de la sesión ordinaria, la comunicación social de la actual LXIII legislatura negó lo mencionado ahí.
“Es falso que el trabajo legislativo realizado por la LXIII Legislatura sea producto de apresuramientos o albazos, pues la agenda legislativa del Congreso hidalguense, y de cualquier otro Poder Legislativo del país, culmina en el momento en que ordena la ley, no antes, no después, ni por voluntad, o capricho de nadie”, expone al principio el posicionamiento.
Expone que todos los dictámenes y aprobaciones son analizados previamente con la participación y avala de todas las fuerzas políticas, entre las que menciona al legislador Efrén Salazar Pérez, representante de Morena en el Congreso local ante la Junta de Gobierno.
Abunda el comunicado que el pasado 31 de julio, lo agentes de la Secretaría de Seguridad Pública de Hidalgo (SSPH) no tenían entre su equipo armas de fuego, sino sólo escudos de contención entre su equipamiento antimotines, además de que se impidió el acceso tanto a manifestantes como a trabajadores del Poder Legislativo.
Por el contrario, a través de su área de comunicación social, argumentó que los manifestantes portaban varillas, piedras y palos, además de que ingresaron de forma ilegal al Congreso, lo que generó daños a las instalaciones, además de que hubo amenazas a trabajadores, con el propósito de impedir el trabajo de la actual legislatura legal.
“No podemos aceptar que esas situaciones se conviertan en hipótesis jurídicas de anulación de los actos legislativos, sino que debe permanecer el ejercicio libre del trabajo legislativo”, expone el comunicado.
Y por último añade: “La LXIII legislatura refrenda su compromiso con la sociedad que, al elegir a sus representantes les dio el voto de confianza para legislar, como corresponde a su trabajo y no para “esperar” a que llegue la siguiente legislatura, como pretenden los y las diputadas electas, lo que además de ser absurdo e irresponsable, resulta una postura prepotente e ilegal, totalmente contraria a la decisión ciudadana expresada en las urnas el pasado uno de julio, en la que se manifestaron en contra de autoritarismos, sea cual fuere la fuerza o actor político que los emita”.