
Da a conocer FGR resultados durante abril en Hidalgo
CHILCUAUTLA, Hgo., 18 de mayo de 2019.- Integrantes de la Unidad Especializada en Prevención del Delito del municipio de Chilcuautla, continúan impartiendo pláticas en las comunidades sobre el tema de extorsión, la más reciente fue a los vecinos de la comunidad de Huitexcalco de Morelos, informó el ayuntamiento.
Lo anterior a fin de continuar con las labores de prevención del delito.
En las pláticas dan a conocer en que consiste el delito de extorsión y de qué hacer en caso de ser víctima del mismo.
Cabe mencionar que no sólo el municipio de Chilcuautla, en la región del Valle del Mezquital ha realizado pláticas de ese tema, pues en marzo pasado policías de El Arenal, participaron en un curso sobre extorsión y secuestro.
Asimismo el año pasado en el municipio de Tasquillo, autoridades auxiliares de las comunidades así como personal de seguridad pública municipal y servidores públicos de ayuntamiento participaron en la plática “Extorsión telefónica”, a cargo de un agente del Ministerio Público de la entonces PGR.
Cabe mencionar que la extorsión es un delito que consiste en obligar a una persona, a través de la utilización de violencia o intimidación, a realizar u omitir un acto jurídico o negocio jurídico con ánimo de lucro y con la intención de producir un perjuicio de carácter patrimonial.
En la extorsión la delincuencia utiliza la violencia psicológica para intimidar a las víctimas, como por ejemplo, utilizando agresiones verbales
En otras ocasiones aprovechan la buena fe de las personas para engañarlas.
En la mayoría de los casos, los delincuentes eligen al azar a la víctima, a veces generan un diálogo previo con la víctima, al ostentarse como representantes de una institución bancaria, prestador de servicios de telefonía e incluso de gobierno.
Su objetivo es obtener información básica para luego utilizarla como parte de su estrategia de extorsión. Otra estrategia para obtener información es analizar imágenes divulgadas en redes sociales, lo que les permite conocer el nivel socioeconómico de la posible víctima y su familia.
Luego obtienen el número del teléfono celular de la víctima, utilizando argumentos relacionados con las actividades o intereses de la posible víctima, o bien, ofertando una posición laboral.
Con datos generales, los extorsionadores tienen elementos para poner en marcha su plan de extorsión y mediante la amenaza o engaño, los delincuentes piden a las víctimas realizar depósitos de dinero a través de tiendas departamentales, comercios o transferencia bancaria.