
Confirman intoxicación de 14 niños por fármaco en Eldorado, Sinaloa
PACHUCA, Hgo., 5 de diciembre de 2019.- Mantener un control prenatal puntual, cuidar la alimentación y la salud de la futura mamá, así como seguir al pie de la letra las indicaciones médicas respecto a la realización de exámenes de laboratorio o de imagenología, son algunas de las recomendaciones del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), para que un bebé llegue al término de las 40 semanas de gestación y nazca sano.
La doctora Luz Angélica Ramírez García, Directora Médica del Hospital de Ginecobstetricia No. 4 del IMSS, emitió estas recomendaciones a las futuras mamás para prevenir que el nacimiento de la niña o el niño se dé antes de las 37 semanas de gestación, pues esto representa complicaciones tanto para la mamá como para el recién nacido.
La especialista destacó que algunos de los nacimientos antes del periodo de embarazo son espontáneos, sin embargo, la mayoría se presentan derivados de una serie de factores maternos que pueden ser: sobrepeso, obesidad, diabetes, hipertensión, infecciones, problemas renales, edad materna muy avanzada o muy joven, así como los tratamientos de fertilización.
Por ello, reiteró, la recomendación es reflexionar sobre la corresponsabilidad entre la planeación de un embarazo en las mejores condiciones con un control prenatal regular. Esto, es: un trabajo conjunto como sociedad e Instituto brindando atención oportuna, de calidad con calidez, eficacia y eficiencia.
El embarazo, dijo, debe ser un acto en donde la mujer cuente con condición de salud favorable, nutrición adecuada, ausencia de ingesta de cualquier tipo de drogas, hábitos higiénicos ponderados, tomar ácido fólico e identificar situaciones de riesgo con su médico responsable.
La doctora Ramírez García, señaló que en el IMSS el porcentaje de prematurez se ha incrementado y actualmente se ubica en 9.75 por ciento, lo que representa 40,411 nacimientos prematuros cada año.
La pediatra neonatóloga explicó que el nacimiento se considera prematuro cuando ocurre antes de las 37 semanas de gestación y éste puede darse antes de las 28 semanas (prematuros extremos); entre las 28 y 32 semanas (muy prematuro) y lo que se denomina como prematuro tardío, que es a partir de las 32 semanas y antes de llegar a las 37.
Indicó que entre más prematuro sea el bebé, mayor es el riesgo que enfrenta, pues nace con una inmadurez orgánica generalizada, lo que quiere decir que su corazón, cerebro, ojos, oídos, pulmón, riñón, intestino tienen que llevar un proceso de adaptación para adaptarse a la vida extrauterina y que sus órganos tengan la madurez para esta transición.
Destacó que muchos de ellos tienen además procesos infecciosos lo que incrementa su riesgo de morbi-mortalidad. Estos factores hacen que el recién nacido permanezca en una incubadora con diferentes soportes que le permitan salir adelante y estabilizar sus funciones orgánicas, por lo que pueden permanecer en el hospital, días, semanas o meses.
De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS) alrededor de 15 millones de bebés nacen antes de tiempo cada año, lo que significa 1 de cada 10. Muchos de estos recién nacidos pueden enfrentar discapacidades de por vida, debido a la inmadurez de sus órganos al nacer.