Campañas electoreras, ciencia, tecnología y vacunas

Twitter: @OswaldoRamirezG

Llevamos casi quince días de campañas electoreras en el estado de Hidalgo, y al igual que en otras entidades de la república los costes y daños colaterales en la política han sido variados. No digamos lo que está pasando con los candigatos de Guerrero y Michoacán para gobernador en MORENA, después de todo el traspié se lo ha puesto ellos mismos al dar luz verde en algunos casos a candidaturas impresentables. Como lo he mencionado en otras ocasiones, el mentado chapulineo político está alejando la poca esencia y simpatía de fervientes colaboradores y creyentes en la 4T. Es por demás decir que para sumar no necesariamente se tiene que regentear la basura y bagazo que otros partidos políticos escupen por vida propia o bien se autoescupen al generar con esta maniobra una intentona en la que el “Efecto AMLO” les siga favoreciendo. Para nada favorece tampoco que el presidente Andrés Manuel insista de dientes para afuera que no está inmiscuido en las candidaturas del partido que lo llevó al ejecutivo nacional, cuando es clara una alineación desde Palacio Nacional.

Es triste y bochornoso pensar que lo que dijo hace varios ayeres el intelectual orgánico Enrique Krauze sea en cierto; estamos ante un “mesías” (un mesías tropical según dicho académico), el cual no solo recomendó al inicio de la pandemia estampitas religiosas para protección anti viral, si no que peca en soberbia o candidez al absolver de toda culpa a todo(as) aquellos perros arrepentidos que llegan desde otros partidos a buscar el cobijo de MORENA, del Presidente y de paso una candidatura ya sea como diputados locales o federales, senadores, o gobernadores y así de paso conservar sus fueros y privilegios porque ¡Ah que miedo es da el poder imaginarse ganar con el fruto de su trabajo un sueldo menor a los 10 pesos!  Sí, te hablo a ti Francisco Xavier Berganza alias “el cantante de un solo éxito”, y si también te hablo a ti ¡Adelfa Zúñiga! Ex priísta. En fin, menos mal que algunos de estos personajes ya los bajaron a la banqueta y solo se quedarán con las ganas. Pero no se trata solo de eso sino de evitar caer en los errores del pasado. Aunque será difícil hacer entender de esto pues para empezar cada mañanera y cada que se puede se repite un discurso histórico desde presidencia por demás a modo tipo “buenos vs malos” “conservadores vs liberales”.

El chapulineo no es solo un fenómeno del que aqueje las filas de MORENA. En esta a la que han osado llamar “la elección más importante de la historia” se está mostrando el lado más bajo y ruin de antiguos adversarios políticos, las fórmulas en las que el PRI va junto al PAN y PRD, auguran algo por demás asqueroso. Está claro que entre los partidos y políticos mexicanos no existen valores, principios o dignidad y por tanto la premisa que un dinosaurio priísta dijo hace unos años es más que cierta “la Moral es un árbol de moras y no sirve ni para una achingada”. Por tanto, no esperemos grandes cosas de este proceso electoral, antes bien una decepción tamaño botas, como las del sexenio de aquel senil, mafufon y blanquiazul ex presidente, Chente Fox. A pesar de todo, algunos que pretenden repetir en la legislatura por parte de MORENA y que han sido congruentes con sus principios, tienen mayores posibilidades de seguir ocupando una curul en San Lázaro. Otros en cambio desde un inicio deberían de estar inhabilitados e incluso con averiguaciones judiciales, y esta vez o hablo del partido en el poder sino de un Samuel García alias el “Gordolfo Gelatino de San Pedro Garza García” candidato a gobernador de NL por Movimiento Ciudadano. El mismo caso va para el enemigo de las micheladas y caguamas, Ricardo Anaya (PAN) quien en lugar de andar haciendo el ridículo debiera vender su proyecto de visita para alguna plataforma o cadena televisiva, ganaría más y le iría mejor de lo que hasta hora le va en la política.

Pasando al punto de ciencia y tecnología, la semana pasada se dieron pasos adelante en relación a la elaboración en el país de la vacuna para Covid-19. Los esfuerzos estarán dirigidos a través del CONACYT (Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología), la UNAM (Universidad Autónoma de México) y el IPN (Instituto Politécnico Nacional). Desde diciembre de año pasado, la Dra. María Elena Álvarez-Buylla la directora general de CONACYT dio a conocer esta posibilidad, hoy  se sumaran esfuerzos en este rubro y en salud en donde pese algunos retrasos, el plan de vacunación se está llevando lo mejor posible, logrando que México esté en el ranking de los 20 países con más dosis aplicadas en el mundo que hasta el pasado viernes 16 de abril ocupaba el lugar número doce con 13.42 millones de dosis aplicadas, por debajo de Italia y por encima de Chile (Fuente: OurWorldInData web page). Lo que se corrobora con aquellos reportes que suscriben que en algunos estados ya ese está aplicando la segunda dosis (refuerzo) en adultos mayores. Ello pese al escepticismo de algunos cuantos y a las reservas que algunos otros tengamos en relación a la aplicación de dosis para el personal educativo (particular y público), según lo sugirió el presidente. Por tanto, el esfuerzo de desarrollar una vacuna propia, la cual  llevará el nombre de “patria”, no obedece a una maniobra de campaña, sino al entendido de adelgazar la brecha de contagios, prevenir y re articular los sectores productivos y de servicios paulatinamente a lo largo y ancho del país. Considerando que el acaparamiento de dosis lo sustentan países de la Unión Europea y los Estados Unidos, quizás después de todo sea loable destacar este esfuerzo.

¿Por qué vale la pena mencionar lo anterior? Porque aunque cueste aceptarlo por parte de detractores y opositores, tal parece que no todo le sale tan mal a la 4T, aun con el discurso que pretenden los candidatos de la insufrible coalición antes mencionada (PRI-PAN-PRD) arguyendo de aquellas viejas glorias institucionales en las que “gracias” a estos partidos (sobre todo al tricolor) se lograron avances, apoyos, instituciones e infraestructura. Cosa menuda no negar el desarrollo material, pero también mucho que reprochar el costo social y político que por más de treinta años generaron estos “avances” los cuales cacarean en sus discursos de campaña. Ahora bien, si el “hubiera” existiera más allá de una palabra me pregunto, si el PRI estuviera sentado en la silla presidencial ahora ¿Habría vacuna? ¿Serían para todo(as)? ¿Quiénes hubiesen estado en la lista de prioridad para aplicación? No lo duden que habrían llegado a la meta y que Televisa y Tv Azteca estarán a lo que da con el apoyo mediático, pero un sexenio más tarde nos enteraríamos de dosis caducas o falsas (aplicaciones de agua), al mero estilo del que ya sabe un tal Jabiduo Duarte veracruzano efectuó durante su gubernatura como tratamientos para cáncer.

En fin, por lo pronto vale más esperar antes que criticar y menos aún desgarrarse por el logotipo fake del futuro Aeropuerto Internacional Felipe Ángeles, el cual para algunos es la aberración más grande de lo que va de este sexenio, como si el chapulineo, los baños falsos de pueblo y las mismas lacras ahora en concubinato para regentear nuestro voto fuera para menos. Yo solo les digo una cosa. Serenos morenos, tranquilos tlacuilos, calmaos todo mundo. Esto es como las gelatinas “a veces salen, a veces no”, pero no solo depende del gobierno y del lloriqueo ciudadano que por poco se lamenta y por mucho estuvo décadas sumiso y masoquista. Cuidarnos de esta pandemia es tarea de todos, lo mismo que exigir resultados a nuestros funcionarios y políticos en todos los niveles, porque después de todo ellos son los funcionarios públicos y el público somos nosotros aunque a veces nonos guste la tonada ni las burradas que efectúan. En tanto, disfrutaos de una semana más y para quienes son afectos a la nostalgia cinéfila dense un tiempo para ver alguna cinta clásica del ídolo del pueblo, Pedro Infante, quien el pasado 15 de abril cumplió 64 años de fallecido, lo mismo que del gran mimo de México Mario Moreno “Cantinflas” que este martes 20 de abril cumplirá 28 años de su deceso. Excelente inicio de semana a todo(as).