
Ráfagas: Sectur Hidalgo, caravana con sombrero ajeno
Hace años Luis H Álvarez, destacado político panista mencionó la frase "Ganar el poder, sin perder el partido", haciendo referencia a la importancia de ganar elecciones sin perder los principios de doctrina del PAN.
Hace unas semanas el PRI durante una asamblea nacional aprobó establecer que "el PRI también se aleja del populismo que logró ascender al poder ante las debilidades que padecen las democracias incompletas que, encerradas en su circuito electoral, se olvidaron de cumplir su cometido en el ejercicio del poder".
Estos cambios se hacen latentes en un año electoral donde se tiene mucho en juego para estos partidos, volteando a un reclamo de su militancia el acatar los principios enunciados en sus documentos básicos, que al estar en el poder se dede actuar conforme a los mismos. Este reclamo es más fuerte aún desde la ciudadanía.
En una apuesta arriesgada la Coalición Va por México busca que se olviden entre los militantes y la ciudadanía las rencillas del pasado entre los partidos, enfocándose en las coincidencias sobre las diferencias, suena fácil en el discurso pero son años de poner hincapié en las diferencias.
Con los movimientos de estos días se tiene prácticamente a quienes contenderán por la Gubernatura Carolina Viggiano, Julio Menchaca y Francisco Xavier. Lo cual pone en una encrucijada al electorado pues si decide desde un punto partidista tenemos un hibrido en el que ningún candidato está plenamente identificado con el partido que lo postula, ni con sus principios.
En la política hay que hacer consensos y negociaciones, muchas veces estos han dejado de lado los principios que enarbolan los partidos, el actuar de sus representantes populares ha llevado al pueblo a buscar elegir al “menos peor” o voltear a “ver a la persona y no al partido”, sin embargo, estamos acostumbrados a ver las diferencias y no las coincidencias.
En unos meses sabremos qué elementos tomará la ciudadanía para elegir a quien gobernará el estado. Si partimos desde una cuestión de principios, diferencias y capacidades ¿cuáles preferirá el electorado las de la persona o el Partido?, ¿existen estas diferencias o buscarán al menos peor?.
Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.