“Un gobierno que mande obedeciendo”

Obituario a Tomás Mojarro.

Twitter: @OswaldoRamirezG

El pasado martes 11 falleció Tomás Mojarro Medina “El Valedor” a la edad de 89 años. Originario de Jalpa, Zacatecas fue un escritor, periodista, intelectual, docente, actor ocasional, conductor y locutor. Su apelativo no requiere una explicación muy compleja; valedor es una palabra mexicana que se designa a la persona que se “da a valer”.

En cuanto a su formación profesional fue becario de El Colegio de México (COLMEX) de 1958 a 1959, y del Centro Mexicano de Escritores, de 1959 a 1961. Estudió teología en el Seminario de Querétaro, sin concluir y Filosofía y Letras en Guadalajara.

Colaboró en periódicos como Unomásuno, El Sol de México (suplemento cultural) y El Metro, el cual se distribuye en la Ciudad de México. También escribió en revistas como Summa, Etcétera, Revista Mexicana de Literatura y Revista Zócalo.

En televisión fue colaborador y conductor en el Canal Once (IPN). En 1985 condujo “Charlas sin sentido”, programa de temas variados emitido en Televisión Mexiquense. En radio trabajó en Radio UNAM y Radio Centro en donde regularmente participaba en el programa “Buenos Días”, conducido por el locutor Héctor Martínez Serrano.

En el aspecto gráfico creó su propia línea de personajes inspirados en La Familia Burrón y en el entorno urbano, los cuales tomaron forma en una historieta que se publicó de 1988 a 1989 titulada “El Valedor”. Esta tira cómica hizo énfasis en la crítica social y política de su tiempo, algunos de sus personajes fueron El Jerásimo, Tano, Sr. Tachira, La Tía Conchis, entre otros. Tiempo después estos fueron retomados en anécdotas y opiniones posteriores. Principalmente  en referencia a fabulillas que utilizó en su emisión de Radio UNAM Domingo 7 que se proyectó por más de quince años el día séptimo de cada semana de las 11 a las 12pm.

Para quienes como este servidor, crecieron en la capital mexicana o área metropolitana recordarán que el programa radiofónico Domingo 7  fue un espacio de discusión y crítica socio política con un aforo no apto para enajenados. Recordaran que en meses pasados nuestro Huey Tlatoani Andrés Manuel tildó  en una de sus conferencias mañaneras a la UNAM de neoliberal; es claro que en esta la lista Domingo 7 es la excepción.

Quienes escucharon antes de la entrada plena de la Era Digital a “El Valedor”, recordarán la sensación agridulce de cada charla radiofónica. Tomás Mojarro dejaba a su auditorio perplejo y desengañado respecto a una visión y perspectiva de nuestro devenir político y social. Sin un alarde de superioridad como muchos intelectuales orgánicos y simuladores de ahora lo hacen, instruía al conocimiento, lectura, redacción y gramática.

Al igual que algunos de ustedes, fue ahí donde escuché por primera vez sus fabulillas sobre el cacomixtle o aquella en la que con alegorías decía que “no se le puede pedir al tigre que cambie y sea vegetariano”, ello en referencia a la naturaleza del sistema y la cúpula del poder. Ahí fue también donde supe qué era una célula auto gestiba y cómo esta podía sobreponerse ante las injusticias del gobierno.

Conocer la historia, analizar el discurso político y el de los medios oficiales fueron una de las herencias del aprendizaje que el buen Valedor nos dejó a muchos(as). Entender que el diálogo solo existe entre iguales y que el pliego petitorio del que muchas organizaciones se quejaban contra el entonces gobierno PRIANISTA era una ilusión más que se desdibujaba peor aún con el ingreso del partido blanquiazul entonces recién llegado al poder.

Quizás por esta razón las participaciones de un chiquillo como yo hacían más nutridos y contestatarios los debates y clases en contra de su profesor de derecha que le impartía materias como Estructura Socioeconómica e Individuo y Sociedad. Tal vez fueron esos debates los que hicieron tomarme en serio la sentencia que decía casi todos los domingos, “lean, conozcan su historia”.

Domingo 7 y El Valedor, sin temor a equivocarme es una de las semillas que tuvo fruto de su reacción en jóvenes y adultos que dieron un paso adelante en las urnas en 2018 para la llegada del partido ahora en el poder. Ahora bien, ¿Qué tanto contribuyó este programa a la consciencia social y a la llegada de la 4T? Con certeza no lo sabemos aún. La historia lo dirá más adelante.

Tomás Mojarro Medina, hombre incómodo con su entorno, amante de la vida, meditabundo y amarguetas. Su pensamiento siempre giro alrededor del materialismo histórico, el enemigo histórico y de la lucha de clases, ello sin perder la brújula de su fe. Lo mismo citaba a los clásicos que a la Biblia y nunca se cansó de criticar los estragos que la aculturación yanqui hace en la sociedad; “gringos de segunda” decía indignado.

Sabio y zafio a veces, de un trato sencillo pero desconfiado. Dicen que no solía saludar de mano con facilidad.  Como escritor  fue autor de varios libros entre los que destacan, El Cañón de Juchipila (1960), Bramadero (1963), Yo El Valedor y Jerásimo (1986), Mis Valedores al Poder Popular (1997), y Trasterra (1973), este último fue el único por el que el autor aceptó un galardón (Premio México 1973), ya que solía asegurar que “el premio copta”.

En este sentido habrá que darle la razón, si consideramos el manojo de intelectuales orgánicos e investigadores de los institutos que hoy en día infieren a su comportamiento sectario y divisionista en la sociedad que lejos de abonar apertura limitan y elitisan el conocimiento.

Cabe señalar que debido al contenido de sus obras y al carácter e ideología del Valedor, Octavio Paz emprendió una campaña de desprestigio en su contra por considerarlo poco serio y profesional.

Dicho esto ¿Será entonces que el Valedor no se dejó cooptar? Todo indica que ahí estuvo la raíz de esa segregación. Pocos intelectuales han sido congruentes como el y pese al momento actual de nuestra historia quizás aún les sea difícil para algunos comprenderlo.

Para aquellos interesados en constatar más sobre el pensamiento y las amarguras del creador de Jerásimo recomiendo se den una vuelta por su canal de Youtube “Tomás Mojarro Oficial” que cuenta con sus emisiones radiofónicas a partir del 2017 hasta 2021.

En fin, “Mis valedores, esto es México”.

Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.