Ráfagas: Voracidad panalista
El ensalzamiento y el mito de muchos personajes viene después de su muerte. Pero en su momento fueron defenestrados y sometidos a censuras de lo que algunos no pudieron reponerse. María de los Ángeles Félix Güereña es uno de los pocos personajes a los que se sometió a exhumación para ver si se había cometido con ella un crimen. Como frágil Dama de las camelias, obra que interpretó en su época, fue extraído su cadáver y se vieron como en aquella Madame Duplessis de Alejandro Dumas sus cabellos rizados, brillantes. También se permitió que medios la difamaran y ofendieran de muchas maneras. Pero ahora las mujeres que harán su papel en Televisaunivisión que filma la bioserie sobre ella, hablan de un personaje que creó época y sirvió de guía a muchas mujeres. Vanos elogios porque ella, ese personaje polémico y lleno de rabia no contenida contra sus detractores, logró elevarse por si sola, hasta dejar el mito que ahora explotan. En su momento, nadie la defendió, ni la consideró ejemplo. Solo Paco Ignacio I, logró profundizar en ese personaje lleno de mérito y demonios y colocarlo en el lugar adecuado de su mitología. Las mujeres que la interpretarán según la época, son Sandra Echeverría, Jimena Romo y Abril Vergara. Bellas, pero sin aquella belleza fuera de lo común, de la paisana.
HOY LA CONSIDERAN MITO, PERO NADIE LA DEFENDIÓ CUANDO LA ATACABAN
Ser la más bella del mundo entre mil 500 millones de mujeres que aproximadamente habitaban el mundo en 1960 parece muy difícil, pero si es una frase propagandística relacionada con el cine y si la seleccionada es indiscutiblemente bella, se puede tomar como una muestra. El conservadurismo sonorense respingó de muchas maneras cuando a nivel mundial se señalaba a María Félix, la mujer más hermosa de la Tierra. Las mujeres de esa entidad de donde había salido, fueron las más críticas. Pero bellas como son muchas de ellas, el énfasis no lo ponían en lo físico, sino en la vida poco convencional de la artista y un tanto el despecho por el desparpajo de una vida que ellas no pudieron o les asustó vivir. La más sorprendida de su fama, debe haber sido la propia María, que desde sus andares de chirota -término sonorense-, corría por los campos de el Quiriego en busca de una nueva vida. Su descubrimiento en 1942, a los 28 años, signó una vida que estuvo en pantallas más de 40 años ¿Alguna película es muy famosa o clásica o la define?, es difícil decirlo y pero en las que suelen exhibirse, creo que más bien la gente las ve para contemplar su rostro, su largo pelo lleno de ondas y su cuerpo esbelto.
SU ESTADO CONSERVADOR, CON SECTORES MISÓGINOS, LA VETÓ VARIAS VECES
A fines de los sesenta se hizo un sondeo en Hermosillo para darle el nombre de María a un boulevard. El rechazo fue rotundo de las mujeres consultadas. En los noventa, cuando se creó el Festival Doctor Alfonso Ortiz Tirado en Álamos, hubo quien la propuso, pero el rechazo fue ratificado. Nadie en ese entorno, era el ser más famoso en la escena de sonorenses, donde figuraban ya Columba Domínguez y Silvia Pinal y se sumó en los setenta Isela Vega, entre otras. Su nombre era el lógico para aparecer en un festival de artes diversas sobre todo por ser una mujer que tenía una cultura singular, que había viajado por todas partes y se movía en el mundo de los compositores, escritores, poetas y cineastas. El nombre del festival se le dio a un tenor, al que nunca se vio por Sonora y que tuvo su breve fama allá por los años cincuenta, Doctor Alfonso Ortiz Tirado. Lo recuerdo por las canciones Clavel del aire y Dime que si.
EN LAS CLASES POPULARES DE SONORA, SE LE RECONOCÍA Y ADMIRABA
María se hizo famosa en medios populares de Sonora por su aspecto y era imitada por las muchachas jóvenes. En la escuela primaria yo estuve con muchas Marías Félix, niñas muy parecidas sobre todo por su melena de ondas y su alto copete. Una niña que trabajaba de doméstica cerca de mi casa era igualita a ella y yo pasaba para acompañarla a la escuela y ahí iba yo acompañada de una María Felix. Mi madre nos enviaba a mis hermanos y a mi, cuando María visitaba Ciudad Obregón, a verla de cerca al dar vuelta en la calle principal donde sus hermanos tenían un cafecito tipo francés. Nos decía que miráramos su copete porque nunca íbamos a ver otro igual. A la par que crecía su fama en el cine, se le relacionaba con personajes poderosos y se casaba con Agustín Lara y más tarde con Jorge Negrete, hacía viajes periódicos a Sonora, pero no había homenajes ni distinciones para ella. Desde la capital llegaban revistas obscenas que la degradaban en una especie de campaña a la que sumaron más tarde a Irma Serrano y a otras. Ese tipo de periodismo, difamador y sucio que ahora se ve en otros contextos, se extendió por largo tiempo no solo en la capital.
MARÍA FÉLIX 47 PASOS POR EL CINE: PACO IGNACIO TAIBO I
El periodista de origen español Paco IgnacioTaibo I considerado el principal biógrafo de María Félix, tituló su libro María Félix 47 pasos por el Cine (Joaquín Mortiz Editorial Planeta 1985 y Editorial Bruguera 2008), basándose en el número de películas que hizo la famosa Doña. Sobrenombre que ella hizo famoso desde que interpretó a la Doña Bárbara de Rómulo Gallegos en el cine (1943). Taibo I caminó largo y tendido por un cine que fue mejorando con los años, siempre con una Félix bellísima que a veces tartamudeaba dice el periodista, pero que inundaba toda una pantalla en la fue generala, profesora, india, guerrillera, mujer fatal entre muchos personajes. El la exhibe como ese personaje único que llenó toda una época con un temple que ella misma diseñó y que el propio Octavio Paz mencionado por Taibo, considera que fue ella “la que se creó a si misma”. El autor también destaca que el cine que en general se hacía en ese tiempo de María, tiene la característica de un cine nacionalista aunque hay que recordar y lo puntualiza él en su libro, que la sonorense también filmó en Argentina e Italia y en España, películas como French Can Cán y La bella Otero, con la que se le comparó, entre otras. No se sabe cual será el trazo que delinie la biografía de María que se piensa mostrar, pero es difícil que profundicen como lo hizo Taibo cuyo libro quizá consulten, por la hondura con la que logró describir a ese personaje.
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