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TULA DE ALLENDE. Hgo. 18 de julio de 2022. A causa de la fuerte tromba de lluvia y granizo que se precipitó la tarde – noche de este lunes en Tula y su región, diversos puntos del centro de esta ciudad, así como otros ubicados en al menos cinco localidades, sufrieron una nueva inundación, la cual hizo recordar a la de septiembre pasado.
Las calles y avenidas de colonias y comunidades altas como Barrio Alto en sus dos secciones y San José se convirtieron literalmente en ríos, cuyas aguas, cobraron gran fuerza a causa de los declives de las vías.
Los líquidos pluviales y residuales se concentraron en las partes bajas de la cabecera municipal, anegando puntos como las calles 5 de Febrero, 16 de Septiembre, el puente a desnivel, Colegio Militar y 5 de Mayo a la altura del tianguis municipal, que también se vio anegado. Locatarios reportaron que el agua de lluvia, revuelta con residual “subió” en algunos puntos hasta medio metro de altura.
Este medio recogió testimonios entre los damnificados de la inundación del pasado septiembre, quienes indicaron que algunos estuvieron a punto de padecer un colapso nervioso, debido al temor de una nueva anegación, por el desbordamiento del río Tula.
En entrevistas separadas comentaron que se inquietaron debido a la intensa lluvia de la Ciudad de los Atlantes y a las que se tuvieron en el Valle de México, donde no han cesado los aluviones en los últimos días.
La tromba fue acompañada de granizo, que cubrió las calles y avenidas de la localidad, además de provocar la caída de techos y árboles, además de infraestructura pública, como postes y anuncios turísticos. También cientos de automóviles se vieron afectados por el peso del hielo.
Al margen de los daños, el gobierno municipal informó a través de un comunicado que los niveles de los ríos Tula y Rosas, no representaban riesgo alguno para la población civil, al menos, hasta el corte de las 18 horas, pero recomendó mantenerse atentos a los comunicados oficiales.
Municipios como Atotonilco de Tula, Tlaxcoapan y Tepetitlán también reportaron intensas lluvias acompañadas por grandes placas de granizo.
Las acumulaciones de agua pluvial y la fuerza con la que bajaron a la zona centro, provocaron que las coladeras del primer cuadro y de las colonias por las que descendieron se “botaran”.
Cabe resaltar que el drenaje del primer cuadro y de toda la cabecera municipal está averiado a causa de la inundación de septiembre, pese a que han transcurrido más de 10 meses de la anegación, el desagüe sigue sin ser reparado.
En febrero pasado el drenaje de la ciudad fue supervisado por el Sistema de Aguas de la Ciudad de México (SACMEX), quien confirmó su grave deterioro, pero no efectuó reparación alguna, sólo hizo recomendaciones de una rehabilitación mayor.