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PACHUCA, Hgo., 30 de agosto de 2022.- Lucio Baños Gómez recibió sentencia absolutoria y orden de su liberación inmediata al no acreditarse el delito de amenazas en contra de su hermano y aún secretario de Turismo del Gobierno de Hidalgo, Eduardo Javier Baños Gómez.
Por unanimidad, el Tribunal de Enjuiciamiento del Juzgado Penal de Control, juicio oral y ejecución del Circuito de Pachuca sentó como veredicto la no acreditación de las acusaciones contra el procesado, el cual fue acusado por su hermano y actual funcionario estatal de haberlo amenazado de muerte en una disputa que sostienen por el predio 1207 de bulevar Felipe Ángeles.
Tras deliberar por poco más de 6 horas al analizar una serie de baterías de pruebas, declaraciones, testimonios y debates, los jueces sentenciaron que no se probó y acreditó los dichos del secretario de Turismo, de ahí la absolución total de los cargos.
Lo anterior causó de manera lógica el jubiló de los familiares presentes en la sala, quienes al conocer el fallo aplaudieron, situación que la defensa también festejo con su defendido, hecho que causó el regaño del juez presidente a cargo, esto para indicarles que si querían estar en la sala evitaran ese tipo de expresiones, lo cual apaciguó los ánimos de quienes se congratularon.
Acto seguido, se otorgó el cambio de medida cautelar que era el de prisión preventiva, para ser ahora dictar la libertad inmediata de Lucio Baños Gómez, la cual se espera su salida del Centro de Reinserción Social de Pachuca en un aproximado de tres horas, de acuerdo con José Alberto Calderón Pérez, abogado de la defensa de Lucio.
Es así que tras 9 meses de ser aprehendido y vinculado a proceso, finalmente este 30 de agosto obtendrá su libertad.
Entre las conclusiones del Tribunal de Enjuiciamiento, los testimoniales de testigos de Eduardo Baños, así como las propias declaraciones del funcionario estatal en su calidad de víctima, fueron dispersas, imprecisas y desentonaban debido a las pruebas mostradas por la defensa de Lucio, que hicieron se cayera la acusación de amenazas que imputó Eduardo contra Lucio, cuyo punto clave para desmontar la versión del funcionario de primer nivel fue la geolocalización de los teléfonos móviles de Lucio, que acreditan que el día donde se acusa la amenaza de muerte con arma de fuego en el sitio de disputa, Lucio no se encontraba con Eduardo.
En palabras de Lucio, tras conocer el fallo y permitirle el uso de la palabra, aclaró que con esto se demuestra que el delito que le imputaron era falso, además de que bajo estas acciones en su contra se cometieron diversos delitos relacionados con Eduardo Baños, sin que lo mencionara, de ahí trato de exigir a los jueces que cuando se imputen esos delitos a los responsables actúen contra ellos, discurso que no le dejó terminar el juez presidente al sesgar la petición e indicarle que si su intención era promover una acción legal consecuente, la realizara primero, lo cual condujo a Lucio Baños a sólo abonar a sus palabras, que se aplique todo el peso de la ley contra quienes actuaron contra él, adelantando la posibilidad de denuncias contra su hermano y testigos una vez que se aclaró su inocencia.