Ráfagas: IHEA, conflicto en puerta

PACHUCA, Hgo., 12 de octubre de 2022.- Mientras el exsecretario de la Contraloría, César Mora Velazquez está en la mira del gobierno estatal ante el hallazgo de diversas corruptelas heredadas en aquella dependencia, algunos de sus cercanos se mantienen al frente de otras áreas, como es el caso del director del Instituto Hidalguense de Educación para Adultos (IHEA) Carlos Alberto Sanchez Marín, a quien está a punto de reventarle un conflicto laboral generado por sus excesos como directivo. Un grupo de trabajadores ya preparan un escrito que enviarán al gobernador Julio Menchaca donde detallan cada uno de los abusos cometidos por este funcionario.

Bienestar, contrastes

Ambientes contrastantes se viven en las oficinas de Bienestar Hidalgo, pues mientras el superdelegado Abraham Mendoza quedó resentido y deambulando por la calle de la amargura porque no supera el no haber sido candidato al gobierno estatal, sus empleadas celebran y habilitan aquellas oficinas como salón de fiestas. Al menos así lo evidencian fotografías compartidas en redes sociales, donde trabajadoras celebraron una despedida de soltera dentro de las oficinas y en pleno horario laboral. Vaya ejemplo del desorden que prevalece en Bienestar Hidalgo.

El desliz de la titular de Sedeso

La que puso a parir chayotes al equipo de comunicación social del gobierno estatal fue la secretaria de Desarrollo Social, Simey Olvera Bautista luego de compartir en sus redes sociales la imagen de un documento con la descripción de cinco problemas sociales, la cual tuvo que eliminar minutos después tras recibir un llamado de atención. Sin embargo, algunos medios replicaron la fotografía y su contenido por lo que las llamadas telefónicas desde primer piso de palacio de gobierno no faltaron para pedir que bajaran la nota, propiciada por el desliz de la funcionaria estatal.

Relajo legislativo

Las diputadas de Morena, Adelfa Zúñiga Fuentes y Sharon Macotela, siguen dando nota y no precisamente por su productividad legislativa sino por convertir el recinto legislativo en una romería. A la primera ya se le hizo costumbre hablar por teléfono en plena sesión legislativa con un elevado tono de voz como para entrar a sus compañeros de sus conversaciones, mientras que Macotela se la pasa dando lata a sus compañeros echando chisme de curul en curul, así el nivel de las legisladoras.