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TULA DE ALLENDE, Hgo., 14 de noviembre de 2024.- Lento avanza el programa para el control y exterminio del heno motita dentro del polígono del Parque Nacional Tula, ubicado dentro de la zona arqueológica de Tula de Allende.
A través de una lona plástica, se informó que el proyecto dio comienzo el 7 de mayo del presente, y que concluiría en un lapso de cuatro meses, sin embargo, las acciones de “saneamiento” cumplieron seis meses la semana pasada, y todavía se observa que más del 50 por ciento de los árboles de la zona protegida, se encuentran infectados con el llamado clavel del aire.
La planta epifita también conocida como brujita, no es considerada una plaga como tal, pero sí acaba con la vida de los árboles a largo plazo.
En la región Tula-Tepeji, el heno motita ha infestado gran parte de los ejemplares de todos los ejidos del polígono, debido a los altos grados de contaminación que persisten en la zona.
Cabe hacer mención que, el clavel del aire se alimenta de las partículas contaminantes del medio ambiente. De hecho, de acuerdo con un estudio realizado por la Universidad Tecnológica Tula-Tepeji, se determinó que la planta es un biodigestor de la polución, es decir, que actúa como filtro para la contaminación.
Desde hace al menos 10 años, los árboles del Parque Nacional Tula, estaban totalmente invadidos por el heno motita, sin que ninguna autoridad hiciera algo para atender la problemática, a pesar de que, desde 1981 el polígono de la zona arqueológica Tula, adquirió la etiqueta de Parque Nacional, por lo que el gobierno federal estaba obligado a destinar recursos anuales para su conservación.
No fue sino hasta 43 años después, que mediante la Semarnat, el gobierno de la República, asignó recursos para la conservación del parque, pero a simple vista, el programa de control y erradicación del heno, ha sido infructuoso, o por lo menos, presenta un avance lento.