
Otra forma de servir: El peregrinar del transporte público
PACHUCA, Hgo., 13 de mayo de 2025.- Durante el 2024, en México desaparecieron o no fueron localizadas 28 personas diariamente de entre 0 y 17 años de edad, mientras que 1,054 niñas, niños y adolescentes fueron halladas sin vida, de acuerdo con el Registro Nacional de Personas Desaparecidas y No Localizadas (RNPDNO) en su último reporte del 14 de marzo de 2025.
Para el caso de Hidalgo, la Red por los Derechos de la infancia en México reporta que la entidad se encuentra en el lugar 20 del ranking nacional de personas desaparecidas o no localizadas con 234 casos hasta el 14 de marzo de 2025.
Otras organizaciones civiles como Sonrisas Perdidas revelan que durante el 2024 en Hidalgo 137 personas desaparecieron, 62 se localizaron con vida, 14 sin vida, y continúa la búsqueda de 61.
En lo que va del 2025, hay 50 personas desaparecidas o no localizadas, 3 ya fueron halladas con vida, una sin vida y sigue la búsqueda de 46.
Aunque estadísticamente Hidalgo no se encuentra en los primeros lugares de entidades con altos índices de desaparición de personas, existe una percepción social y mediática de que este delito va al alza, principalmente por la falta de resultados y desinterés del Comisionado de Búsqueda de Personas en Hidalgo, José Francisco García Reyes y de la Fiscal Especializada para la Investigación y Persecución de Delitos de Desaparición Forzada de Personas, Lidia García García.
El pasado 3 de mayo durante una conferencia del Gabinete de Seguridad de Hidalgo para dar a conocer el hallazgo de un narcolaboratorio en el municipio de Acaxochitlán, la periodista Verónica Ángeles cuestionó al Comisionado García Reyes sobre qué porcentaje de desapariciones estarían vinculadas a un hecho delictivo, a lo que el funcionario reviró ambiguamente que el 80 por ciento de estas no tenían relación con situaciones de esa naturaleza, solo el 20 por ciento restante, principalmente “con privaciones ilegales de la libertad”.
El funcionario se negó a complementar la información amparándose en el artículo 218 del Código Nacional de Procedimientos Penales, que le impedía -supuestamente- ahondar en el tema, aunque la comunicadora le aclaró que no le estaba pidiendo hablar de un caso en particular, sino de manera general.
El argumento legaloide del Comisionado pareció más un recurso de bote pronto para ocultar su desconocimiento sobre el tema, pues el artículo que invocó para salir al paso de los cuestionamientos se refiere a la reserva de los materiales de la investigación, como documentos, objetos, registros de voz, imágenes o cosas que estén relacionados con la pesquisa, elementos que la reportera nunca solicitó.
El mismo comportamiento evasivo asumió la Fiscal Lidia García García, durante una entrevista telefónica que intenté realizarle en octubre del 2024. Primero argumentó sentirse indispuesta lo cual le impediría responder de manera acertada, proseguí con el interrogatorio pero no pudo responder una sola de mis preguntas relacionadas con la operatividad de la dependencia que encabeza, y en respuesta solo obtuve silencios prolongados al otro lado de la línea acompañados por la titubeante frase: “no estoy preparada”. El desconocimiento y desfachatez de la funcionaria me obligaron a cortar la comunicación.
Otro joyita más: El pasado 12 de mayo, la Comisión de Búsqueda de Personas fue objeto de críticas en redes sociales que rayaron en la burla, pues emitieron una ficha de búsqueda de alguien, pero sin nombre y sin foto.
No solo los periodistas han constatado el deficiente trabajo de esta dupla de funcionarios; colectivos y activistas se quejan por la falta de diálogo y acompañamiento de la Fiscalía y de la Comisión, esta última por cierto que tiene acceso a millonarios recursos como los más de 19 millones de pesos que recibirá por parte de la Federación para la compra de herramientas tecnológicas, eso sin contar con los casi 10 millones de pesos de presupuesto que tiene para operar este año.
Mientras tanto, colectivos y familiares buscadores de personas siguen esperando mejores resultados, más capacidad y menos indolencia de sus autoridades.
@AlexGalvezQ