
Ráfagas: Acusan a subprocurador
PACHUCA, Hgo., 7 de agosto de 2025.- Vaya escándalo en el que está involucrada la secretaria de Cultura del Gobierno de Hidalgo, Neyda Naranjo Baltazar quien incurrió en una conducta que raya en lo ilegal y podría tener consecuencias legales.
La secretaria de Cultura, la misma que hace unos días le cambió el nombre al destacado cronista e historietista hidalguense Gabriel Vargas Bernal al llamarlo “Gabriel García Bernal” en plena ceremonia de entrega de la medalla Miguel Hidalgo en el Congreso local, enfrenta señalamientos de espionaje, maltrato y acoso laboral en contra de sus empleados.
Resulta que la funcionaria estatal se las ingenió y durante meses espió el teléfono celular de la subsecretaria de Desarrollo Cultural, Irma Balderas Arrieta accediendo así, a decenas de conversaciones con periodistas, artistas, funcionarios estatales, federales y hasta con el Auditor Superior del Estado de Hidalgo, Jorge Valverde Islas lo que la ha metido en una peligrosa polémica que podría terminar en los tribunales.
La invasiva y detectivesca labor de Neyda Naranjo, culminó con el despido de Balderas Arrieta y de Lidia López directora de Área, ambas víctimas del espionaje y cuyas conversaciones no gustaron a la secretaria de Cultura quien en venganza, les exigió su renuncia.
Balderas Arrieta es una de las funcionarias más experimentadas y con un amplio conocimiento en el ramo cultural, en más de una ocasión se echó a los hombros la operatividad de la Secretaría de Cultura, pero pesaron más las filias y fobias de su exjefa quien tiene mucho que explicar sobre el espionaje en aquella dependencia, pues aparentemente hay otros empleados que están bajo vigilancia.
El asunto ya brincó a Palacio de Gobierno y hay quienes están exigiendo una investigación a fondo, porque Neyda también enfrenta señalamientos por convertir a Cultura en una agencia de colocaciones para sus conocidos, como es el caso de quien le diseña sus vestidos a quien obsequió una dirección y quien curiosamente es la misma persona que le confecciona sus prendas con bordados a la senadora Simey Olvera.
Las cosas están que arden en la Secretaría de Cultura, donde, por cierto, el exdirigente de una agrupación del PRI fue llamado para cubrir el cargo que dejó vacante Balderas Arrieta.
X:@AlexGalvezQ