Topógrafo corneal portátil incubado en la UNAM
PACHUCA, Hgo., 27 de mayo de 2021.- En México, de acuerdo con la UNICEF, 50 por ciento de los niños entre 6 y 11 años son usuarios de internet, mientras que el porcentaje en adolescentes entre 12 y 17 años representa poco más del 80 por ciento. De este último grupo, encuestas nacionales indican que el 25 por ciento ha experimentado alguna forma de ciberacoso.
La pandemia por Covid 19 ha hecho que millones de niños y jóvenes no puedan tomar clases de forma presencial, lo que lleva a que muchos estudiantes de nivel básico a superior tomen clases y socialicen más por medio del internet, lo que puede agudizar la exposición de los menores a situaciones de riesgo.
Ante esta situación, la compañía ESET, líder en detección proactiva de amenazas, desde su iniciativa Digipadres, acerca consejos para cuidar la seguridad de los más pequeños al utilizar dispositivos electrónicos y la aplicación Zoom para acudir a sus clases u otras actividades.
Entre las formas más comunes de acoso en Internet se encuentran las derivadas de la exposición de imágenes o videos. Utilizando códigos maliciosos, los ciberdelincuentes pueden intentar comprometer un dispositivo, obteniendo acceso a su cámara o micrófono sin el consentimiento de los usuarios, espiando los aspectos más íntimos de sus vidas (spyware).
Desde Digipadres, para cuidar a los niños de esta amenaza, se recomienda enseñarlos a cubrir sus cámaras siempre que no las estén usando, asegurarse de que la configuración por defecto de la cámara web siempre sea “apagada”, utilizar soluciones de seguridad capaces de proteger las cámaras a nivel software, educar a los niños para que no hagan nada frente a una cámara web descubierta que no harían si alguien estuviera mirando y cubrir las cámaras de toda la familia.
En cuanto a las plataformas de videollamadas, las mismas están expuestas a sufrir brechas de ciberseguridad, hackeos, filtraciones de datos, entre otras. Por eso es importante configurarlas desde el hogar para reducir al máximo los riesgos de quedar involucrados en estos ataques.
Asegurarse de que las llamadas sean privadas y que solo se pueda acceder con contraseña o link para evitar intrusos en ellas, iniciar las reuniones siempre con cámara apagada y, si es obligatorio, prenderlas asegurándose de cambiar el fondo, haciendo que se vea borroso o usando un fondo predeterminado de Zoom para evitar que se revele información personal de forma involuntaria.
Enseñar a los niños a que no compartan (ni por escrito ni en diálogo) información personal o confidencial y activar el doble factor de autenticación (2FA). Zoom agregó a finales de 2020 esta posibilidad que agrega una capa de seguridad a las videollamadas.
“Luego de tener clases, ya sean virtuales o presenciales, es muy probable que los niños quieran en algún momento utilizar dispositivos electrónicos para jugar, publicar en las redes sociales o simplemente distraerse. Esto es algo común en la nueva normalidad y sucede cada vez con mayor frecuencia. Por eso es importante, además de educarlos en ciberseguridad, contar con una solución de seguridad con control parental”, expusieron especialistas de ESET.