Topógrafo corneal portátil incubado en la UNAM
PACHUCA, Hgo., 21 de septiembre de 2018.- En días pasados se desarrolló en la ciudad de Puebla la XXV Semana Nacional de Ciencia y Tecnología organizada por el Conacyt, y en el que participaron museos interactivos como el Universum, el Rehilete de Pachuca y el Interactivo de Economía (MIDE).
Por primera vez el evento se organizó fuera de la Ciudad de México y en esta ocasión por se propuso a Tepic, Toluca y Puebla, como sedes alternas, informó el director del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt), Enrique Cabrero Mendoza, quien detalló que este año el tema fue los «Desastres naturales: huracanes y terremotos» a propuesta del propio Conacyt a los museos y universidades participantes.
Agregó que la intención es que los asistentes de este evento conozcan los desarrollos científicos que hay en torno a estos temas, pero siempre conjugados con la cultura de la protección civil.
“Los huracanes y terremotos son algo recurrente en nuestro país, por eso la importancia de que la prevención no se reduzca a un conjunto de simulacros sino que se deben promover y tener una serie de hábitos y conductas familiares, vecinales, estatales y federales para enfrentar mejor estos fenómenos naturales”, aseveró.
Se informó que para esta edición, se espera al menos la llegada de cinco mil asistentes de diferentes regiones del estado, principalmente de escuelas de nivel básico y medio superior, donde también se ofrecerán cuatro conferencias, además de exposición de proyectos en el área de ingenierías y desarrollo urbano, así como la participación de 184 capacitadores de diferentes facultades.
En el marco del evento, el Museo El Rehilete rindió un homenaje a los elementos del Ejército Mexicano, quienes a partir de su Plan DN-III-E atienden a las personas en situación de riesgo o crisis a causa de un fenómeno natural. Con ladrillos rotos y escenarios con imágenes reales sobre lo acontecido el 19 de septiembre es como se recordó a los asistentes de la contingencia que se vivió y la forma en cómo se enfrentaría otra experiencia de ese tipo.
Otra actividad que ofreció el Rehilete fue el juego de las llaves. Con una simulación de diferentes conductos de agua, gas y electricidad, los niños pueden aprender cómo cerrar cada uno de los modelos y aprender a qué tipo de conexión pertenece y cuáles son las que se deben cerrar de forma inmediata en caso de una emergencia.
También una dinámica con muñecas tiradas en el suelo, ropa prensada entre muros de concreto, juguetes, un zapato, cualquier objeto puede darnos una señal de quién habitaba un inmueble destruido por un sismo. La simulación de los escombros y los objetos que se encuentran permiten a los visitantes saber cómo buscar y deducir quién vivía ahí e incluso cuántas personas pueden permanecer atrapadas. La clave está en observar lo que hay en cada paso.
Para cerrar el bloque del Museo El Rehilete, los niños y adultos armaron una mochila que contenga los objetos necesarios para la supervivencia en caso de un desastre natural. ¿Qué es más importante, mi videojuego o una barra de chocolate que me aporte calorías? Se pregunta uno de los estudiantes que realiza este ejercicio.
Con información de: CONACYT, Agencia de Información.