El crimen y los paraísos perdidos

MORELIA, Mich., 19 de enero de 2017.- Los hechos violentos ocurrido en Playa del Carmen y Cancún, Quintana Roo confirman que la delincuencia organizada se encuentra en todo el país, seguramente en más de 90 por ciento de los municipios. Además del miedo y la zozobra de los habitantes, los grupos criminales afectan la economía de todo el país.

Nos enteramos que un grupo armado atacó las instalaciones de la Fiscalía General del Estado (FGE) y de la policía municipal, lo que provocó la muerte de un agente y tres presuntos sicarios, cinco agresores detenidos y algunas armas largas incautadas, según autoridades estatales.

Sabemos que dos ex gobernadores se involucraron en el tráfico de drogas, pero además de la presencia de varios cárteles del crimen, lo que significa guerra entre grupos, pero sobre todo corrupción en los cuerpos de seguridad de los tres órdenes de gobierno.

Acapulco, Guerrero fue el paraíso de propios y extraños, sin embargo la inseguridad y la violencia han alejado al turismo nacional e internacional. De hecho, todo mundo sabe que hay grupos del crimen que operan en esa región costera, y que incluso todo ese estado se ha convertido en un polvorín provocado no solo por los criminales, sino desgraciadamente también por parte de autoridades.

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