Invirtió Hidalgo cerca de 350 mdp en infraestructura de salud
PACHUCA, Hgo., 7 de diciembre de 2015.- El médico del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), delegación Hidalgo, Raúl Contreras Omaña, fue reconocido por la Escuela de Medicina de Harvard, en Boston, Massachusetts, por combatir un raro padecimiento que se deriva de una esclerosis sistémica.
De acuerdo a un comunicado de la institución, se trata de un padecimiento muy raro, puesto que en los últimos 30 años sólo se contabiliza un aproximado de tres casos en todo el mundo, y uno de ellos fue el que trató el cirujano con varias especialidades e investigador adscrito al Hospital General de Zona con Medicina Familiar (HGZ/MF) No.1 de Pachuca, lo que le valió una publicación en la revista médica más prestigiada a nivel mundial, la New England Journal of Medicine que edita esta universidad estadounidense.
La esclerosis sistémica es un padecimiento autoinmune causado por el mismo organismo, principalmente afecta a mujeres de entre 25 y 50 años de edad con familiares que hayan padecido enfermedades como artritis reumatoide o lupus; afecta el tejido conjuntivo con cambios en la piel, vasos sanguíneos, músculos y órganos internos, informó mediante esta misiva el IMSS.
En este caso la paciente fue una mujer de 46 años, quien acudió por una obstrucción intestinal, lo que le provocaba que todo lo que comía lo vomitaba, razón por la cual ya había tenido una pérdida de 15 kilos de peso, situación que la puso al borde de la muerte, aun cuando las radiografías, endoscopía y tomografía, no mostraban ningún problema.
Al a ser un padecimiento poco conocido, el especialista realizó los estudios y el historial clínico adecuados para identificar que el problema se ubicaba en la primera parte del intestino delgado, el cual ya no registraba movimiento; de esta forma diagnosticó el megaduodeno.
“El panorama era muy malo, la paciente se estaba deteriorando muy rápido, llevaba ya varias semanas sin poder alimentarse; la única opción, si no hubiéramos encontrado este diagnóstico, hubiera sido ponerle una alimentación por la vena y eso le hubiera dado mucho riego de infecciones y complicaciones, hubiera podido fallecer pronto”, señaló.
Sin embargo, pese a que la esclerosis sistémica no tiene cura, además de ser progresiva, mediante la colocación de una sonda en una sección posterior a la afectada en el intestino, fue posible alimentarla, con lo que logró subir de peso, mejorar su calidad de vida y principalmente se evitó la muerte.
En este sentido, el doctor Raúl Contreras, quien se ubicó como el primer médico mexicano en publicar un trabajo en torno al tema en la New England Journal of Medicine, señaló que pese a que el HGZ/MF No.1 es un hospital de segundo nivel, los especialistas con los que cuenta realizan funciones de un nosocomio de tercer nivel (alta especialidad).
El especialista también fue reconocido en 2014 el premio al Mérito Médico que otorga el gobierno de Hidalgo.