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PACHUCA, Hgo., 2 de octubre de 2019.- Pese a ser un padecimiento curable si su detección es temprana, el cáncer de mama continúa siendo la tercera causa de muerte en México y la primera en razón de género.
Así lo informó en entrevista Rocío del Valle Campos, coordinadora de Enfermería Delegacional en Salud Pública del Instituto Mexicano del Seguro Social en Hidalgo, al referirse a las acciones que lleva a cabo la institución de manera permanente, pero enfatizadas en este octubre, mes de la sensibilización sobre el cáncer de mama.
Lamentó que más del 90 por ciento de las usuarias de los servicios de salud acudan a consulta en etapas tardías de cáncer de mama, pues el padecimiento es prevenible por medio de las acciones de detección oportuna como la exploración clínica de mama a partir de los 25 años y las mastografías a partir de los 40.
La enfermera insistió en la necesidad de que las mujeres se conciencien acerca de su salud y acudan a los módulos de enfermería y de Prevenimss en su Unidad de Medicina Familiar para la exploración clínica tras la cual también se les educa sobre la autoexploración, la forma de practicarla y su frecuencia.
Hizo un llamado a las derechohabientes a realizarse estos chequeos en sus clínicas e incluso instó al uso de la aplicación para teléfono móvil CHKT En Línea, que, por medio de un cuestionario breve, arroja resultados sobre si una mujer tiene alto o bajo riesgo de cáncer de mama e incluso otorga una cita.
Asimismo, enlistó que para este padecimiento existen factores de riesgo modificables y no modificables, siendo estos últimos los que no dependen de la paciente, como la edad, el género, la herencia o los antecedentes familiares, menarca antes de los 12 años o menopausia después de los 52 años.
Sin embargo, existen factores modificables como el tabaquismo, el alcoholismo, el sedentarismo, así como el embarazo después de los 30 años, la falta de lactancia materna y la alimentación que contribuyen al riesgo de cáncer.
Por lo anterior, dijo, el IMSS fomenta la lactancia materna única por los primeros 6 meses de vida y complementaria hasta los 2 años, ya que está comprobado que esta es un factor protector para disminuir el riesgo de cáncer de mama, además, apuntó que no es un mito que las mujeres que no tienen hijos tengan riesgo mayor de padecerlo.
Reiteró que las acciones para la prevención son permanentes y en el Hospital General de Zona número 1 en Pachuca se cuenta con mastógrafo para atender a las usuarias, además de que también se lleva el servicio móvil en fechas específicas a las unidades en las que el Seguro Social tiene presencia.
Instó a las mujeres al autocuidado de su salud y a poner atención en los cambios en la coloración de la piel, a la presencia de piel de naranja, hundimientos o protuberancias en senos, así como secreción sanguinolenta por el pezón, al tiempo que hizo énfasis en los tres aspectos para la prevención, como son la autoexploración, la exploración clínica y la práctica de mastografías.