Mbappé, Rodrygo y Vinícius transforman sueño en pesadilla para Pachuca
PACHUCA, Hgo., 23 de junio de 2020.- Luego de haber entrenado en Austria, Rumania, España y Francia antes de la pandemia, hoy Nabor Castillo entrena en casa con ayuda de su esposa Debanhi Ochoa y del equipo multidisciplinario del Centro Deportivo Hidalguense y de Alto Rendimiento (CDHAR) con la consigna de alcanzar sus objetivos y metas.
El judoka participó en la sesión organizada por el Instituto Hidalguense del Deporte (Inhide) denominada Vivencias de un Campeón, parte de una estrategia para impulsar a deportistas hidalguenses durante la pandemia mostrándole apoyo.
Nabor Castillo Pérez conversó de manera virtual con miembros de la Asociación Hidalguense de Judo (AHJ), entrenadores, deportistas, titulares del deporte municipal (Comude) y el equipo multidisciplinario del Centro Deportivo Hidalguense y de Alto Rendimiento (CDHAR), quienes escucharon sus experiencias y vivencias en el deporte.
Con unos juegos olímpicos en el historial, Nabor Castillo habló de sus inicios y el primer contacto que tuvo con la disciplina, su preparación como judoka de alto rendimiento, así como sus debilidades y fortalezas en el desempeño deportivo.
Tras la fractura en su muñeca en los Juegos Centroamericanos y del Caribe, Barranquilla 2018, Castillo platicó de su actuar ante lesiones, además de la clave para verse glorioso en cada uno de sus combates.
De igual forma, abordó las vivencias obtenidas en los Juegos Panamericanos Lima 2019 y su proceso de clasificación a los Juegos Olímpicos Tokio 2020, así como su compaginar de la vida personal con el deporte.