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PACHUCA, Hgo., 27 de enero de 2016.- Durante los últimos 30 años en México se ha perdido el poder adquisitivo en un 40 por ciento, lo que significa que con el mismo salario una persona no puede satisfacer sus necesidades de la canasta básica, de acuerdo con el estudio de ingresos de la población de la Comisión Nacional de Salario Mínimo (Conasami).
De 1986 a la fecha los mexicanos han empeorado su alimentación, pues el aumento de los costos de los productos de la canasta básica ha provocado que las personas adquieran alimentos de peor calidad, según dio a conocer el reporte.
De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), de 2005 a la fecha, más de 10 millones de personas han abaratado sus ingresos, por lo que sólo el 15 por ciento percibe una remuneración económica superior a los tres salarios mínimos, mientras que el 60 por ciento sobrevive con dos salarios mínimos y el 10 por ciento lo hace con el pago básico que recibe un trabajador en el país.
Aunque en septiembre pasado la Conasami acordó homologar el salario mínimo en el país para eliminar la desigualdad económica que se perciben en diferentes regiones, el ingreso aceptado hasta el momento es de 70.10 pesos por día, es decir, mil 682 pesos al mes, cifra que es insuficiente para garantizar la cobertura de las necesidades básicas de una persona.
En 1986, una persona que recibía el salario mínimo podía adquirir los productos de la canasta básica, que incluyen frijol, huevo, arroz, leche, tortillas, aceite, azúcar, café, pan, carne, frutas y verduras, sin embargo, actualmente con los 70.10 pesos diarios del salario mínimo una persona sólo puede adquirir el 40 por ciento del total de los productos necesarios.
Pese a que la Constitución establece que un trabajador debe ganar el salario que satisfaga sus necesidades alimenticias y de vestido de manera digna, en las últimas tres décadas la situación ha empeorado para los trabajadores de actividades primarias que reciben el ingreso mínimo.
Hidalgo históricamente se ha ubicado entre las entidades de peor crecimiento y desarrollo económico del país, por lo que se ubicó en la tercera zona del ingreso mínimo considerada como la región “C”, no obstante, luego de que eliminó este mecanismo en 2012, se situó en la zona “B”, todavía la zona donde se perciben menores ingresos económicos que en entidades como el Distrito Federal, Querétaro, Nuevo León o Jalisco, las cuales se posicionan como las que mejores ingresos económicos otorgan a los trabajadores.
Con la desaparición de las zonas históricas, la Conasami pretende igualar el ingreso mínimo de Hidalgo con estados de mayor desarrollo económico, aunque esto aún no se ha traducido en resultados positivos para los trabajadores.
Antonio Sánchez Méndez, economista investigador de la Universidad Autónoma del Estado de Hidalgo (UAEH), explicó que el ingreso mínimo en el estado es inferior, pues no hay fuentes de ingresos sustentables que garanticen mejores condiciones de vida a los trabajadores, pues la mayor parte del estado subsiste de las actividades agrícolas.
El académico detalló que en Hidalgo hay poca inversión de corporativos de actividades terciarias, pues el gobierno les ofrece escasas garantías parar realizar inversiones, por lo que prefieren entidades como Querétaro y Puebla, las cuales se han consolidado como centros de desarrollo en la zona centro del país.
Una de las causas que ha generado la deficiencia de los ingresos de los trabajadores, es la devaluación que se generó desde que México firmó el Tratado de Libre Comercio, pues el entonces gobierno de Carlos Salinas de Gortari se comprometió a igualar en las exportaciones, importaciones, así como en los valores de producción con Estados Unidos y Canadá, economías sólidas con relación a la mexicana.
A pesar de que la Secretaría de Trabajo y Previsión Social (STPS) consideró que una familia mexicana puede subsistir con un ingreso mensual de seis mil pesos, el costo de los productos para mantener a una familia de cuatro miembros es de al menos 8 mil pesos mensuales.
El Partido Acción Nacional (PAN) y el Jefe de Gobierno de la Ciudad de México, Miguel Ángel Mancera, han propuesto incrementar en al menos 86 pesos diarios el salario mínimo, propuesta que de acuerdo con el Banco de México provocaría una eventual inflación monetaria en el país.
Al respecto, el delegado de Inegi en el estado, Mauricio Márquez Corona, reconoció que es necesario asegurar un mejor salario a la población económicamente activa, sin embargo, para ello primero se deben garantizar las medidas que prevengan una eventual inflación o de lo contrario Hidalgo podría ser una de las entidades más afectadas por ser considerada una zona pobre.
En un sondeo general que realizó Quadratín Hidalgo previamente, se reveló que la población está en contra del salario mínimo actual y se pronunció por un incremento real en los ingresos de los trabajadores.
En promedio, desde la crisis económica de 1995, el salario mínimo ha incrementado apenas un peso por año en promedio, mientras que productos como la leche, huevo o la carne han registrado un incremento del 800 por ciento en las últimas décadas.