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PACHUCA, Hgo., 30 de enero de 2015.- La Comisión de Derechos Humanos del Estado de Hidalgo (CDHEH) dio a conocer el resultado de su segundo diagnóstico penitenciario, donde revela que existen pocos avances en las recomendaciones que se realizaron a mediados del año pasado.
Sobrepoblación, inmuebles habilitados para cárceles que no cuentan con las condiciones adecuadas, no existe separación entre hombres y mujeres, ni entre procesados y sentenciados y a las condiciones del Centro de Internamiento para Adolescentes, son sólo algunos de los problemas que impiden que los centros de readaptación del estado funcionen con gobernabilidad y se cumpla con la reinserción social.
Una de las recomendaciones es derivada de los hechos del fallecimiento de un interno en Pachuca, en donde se señala que al existir dudas se dé vista a las autoridades competentes para que realicen las actuaciones e investigaciones respectivas, que permitan llegar a la verdad de los hechos.
Dicho diagnóstico, el organismo lo realizó en la entidad, a las Cárceles Distritales y al Centro de Internamiento para Adolescentes, así como a las áreas de retención municipal, y encontró que en el caso de Tula, Ixmiquilpan, Jacala y Pachuca se reportan niveles de sobrepoblación, que fluctúan entre 50 y 200 por ciento.
Asimismo, da a conocer que existen inmuebles habilitados como cárceles que datan de hace muchos años, en las cuales se complica tener condiciones adecuadas para el cumplimiento de un programa de reinserción, como las cárceles en Jacala, Mixquiahuala, Apan, Huichapan, Ixmiquilpan y Molango.
De igual forma, se señala que es necesaria la separación de mujeres y hombres; de procesados y sentenciados; de jóvenes y adultos mayores; internos del ámbito estatal y federal; delincuencia común y organizada; primo delincuentes con reincidentes; de alta peligrosidad y mínima, de prisión preventiva y penitenciaria; todo lo cual afecta seriamente la estabilidad de los Centros de Internamiento.
La dependencia señaló una serie de propuestas como son el constante aumento en los diferentes centros de la entidad, resulta necesario que el Gobierno del Estado, continúe con el traslado, tanto de procesados como de sentenciados del fuero federal.
Manifestó que para lograr una mayor seguridad, gobernabilidad y respeto a los derechos humanos de las personas internas, la CDHEH propone acompañar los operativos, cateos y visitas que realicen las dependencias de seguridad pública estatales.
El número de mujeres internas en centros penitenciarios es de 300 y representa el 7.09 por ciento del total de la población penitenciaria; en el primer semestre ascendía a un total de 296, los espacios donde se encuentran carecen de servicio médico especializado, áreas laborales, espacios para atender y cuidar a sus hijos, áreas separadas para estudiar y capacitarse laboralmente, detalla el diagnóstico.
De igual manera, se encuentran 17 menores de edad que oscilan entre uno y cuatro años de edad y se ubican principalmente en los centros de Pachuca, Jaltocán, Tula, Tulancingo y Tenango de Doria, quienes por razones de maternidad tienen la necesidad de vivir junto a sus madres, cuyos derechos fundamentales deben ser debidamente atendidos por las autoridades penitenciarias.