Nuevamente detuvieron a extesorera de Tlaxcoapan
PACHUCA, Hgo., 12 de mayo de 2020.- Pensar que los índices delictivos irán a la baja por la ausencia de personas en las vías, así como transportes públicos, es una falacia, porque mientras el número de robos en la calle y a transeúnte disminuyen, las extorsiones y el abuso por internet van al alza.
Así lo considera Jimena Cándano, directora general de Fundación Reintegra, promotora de la justicia social.
“Como se sabe, la manera más eficaz para combatir este virus es el distanciamiento social, lo cual pone a prueba una aptitud necesaria: la adaptabilidad, esto incluye a quienes viven de actividades ilícitas.
“Quienes viven de la delincuencia buscarán adaptarse y encontrar nuevas formas de llevar a cabo su “negocio”. Sin embargo, el delito de ocasión sí se verá reflejado a la baja, pero el delito de violencia intrafamiliar se encuentra al alza, las víctimas han sido encerradas con sus victimarios, y aún no hay albergues suficientes o una estrategia para atender esto”, apuntó.
Ante este escenario, resulta complicado pensar que la cuarentena favorecerá a la seguridad en un país como México, pues mientras bajan los delitos en la calle, aumentan los que se producen en el mundo virtual.
Expuso que la comisión de delitos tiene, entre otras causas reales, un sistema educativo ineficiente e incluso inexistente para algunas comunidades; la desigualdad económica y social; desintegración familiar, maternidades, así como paternidades forzadas o ausentes; corrupción; impunidad; sistemas penales poco eficientes; cultura de ilegalidad; normalización de la violencia; ausencia de políticas que garanticen las mismas oportunidades laborales y una sociedad indiferente que además es punitiva, la cual busca venganza en vez de justicia.
“En tanto no trabajemos en estas condiciones no podremos aspirar a que los índices delictivos comiencen a disminuir en nuestro contexto habitual, ni en uno de emergencia sanitaria como el de pandemia del Covid 19 que nos vulnera a todos”, enfatiza Cándano.
“La configuración del mundo a partir de los estragos del coronavirus debe comenzar ahora, reflexionemos en torno a cómo debemos actuar en adelante, trabajemos en crear entornos más seguros que propicien el sano crecimiento de nuestros niños y adolescentes para que los actos delictivos no sean una opción. Seamos partícipes en la creación de la sociedad en la que queremos vivir, optemos por una actitud proactiva para nuestro bienestar en cualquier escenario”, finalizó.