Se incendia vehículo en la México-Tuxpan
ATOTONILCO DE TULA, Hgo., a 4 de julio de 2020.- Hasta este mediodía continuaba el bloqueo de la entrada principal de la Planta Tratadora de Aguas Residuales ubicada en este municipio, además de que ejidatarios de municipios aledaños ya se organizan para ampliar el bloqueo y llevarlo a carreteras debido a la falta de atención a sus demandas.
Campesinos de varios municipios del Valle del Mezquital llevan más de 30 horas manifestándose para solicitar el cierre de la que fuera considerada una obra destinada a salvar los ríos de la región de la grave contaminación y tratar las aguas residuales que reciben las parcelas del distrito de riego 03 y que se anunciara como una magna obra con el objeto social de sanear las aguas en esta zona.
Productores de los distritos 03 Tula y 100 Alfajayucan, afirman que la planta que opera la Comisión Nacional del Agua (Conagua) no funciona como se esperaba y, por el contrario, no cuentan con agua suficiente para alimentar sus cultivos, además de que están inconformes debido a que la materia orgánica que nutría las tierras ahora es mínima y no sirve para sus cosechas.
A la protesta se han unido vecinos de comunidades aledañas a la planta que afirman que han sido afectados por altos niveles de contaminación causados por la PTAR, pues esos mismos desechos orgánicos ocasionan lodos contaminantes y hacen que proliferen las moscas, además de que deben soportar fétidos olores e incluso señalan que han visto el crecimiento de larvas en la piel de la gente debido a la contaminación.
Asimismo, los campesinos replican que la planta pretendía limpiar el agua potable de los pozos artesanos que estaban contaminados con arsénico, plomo y mercurio, situación que no se ha dado, pues les informaron que la planta fue para retirar 85 por ciento de la materia orgánica, pero no los metales pesados.
Agregaron que, anteriormente, cuando sus tierras se regaban con el agua proveniente del canal El Salto-Tlamaco, columna vertebral del distrito 03, éste aportaba, en su máxima capacidad, hasta 50 metros cúbicos por segundo y los cultivos no necesitaban abono ni fertilizante, además de que producían en mayor cantidad y con mejor calidad granos y forrajes, pero tras la instalación de la PTAR, que sirve de “tapón”, sólo obtienen de 23 a 24 metros cúbicos por segundo y gastan millones en fertilizantes y abono.
Los inconformes piden la atención de la directora de Conagua, Blanca Jiménez Cisneros, y se niegan a negociar con otros funcionarios que no cuenten con poder de decisión, además de que piden también el apoyo del Gobierno del Estado para respaldar su petición, que es el cierre total de la planta por ser lo que ellos denominaron “una obra estúpida que sigue contaminando suelo, subsuelo, mantos freáticos y acuíferos y generando gastos en fertilización y abono de la tierra”, según lo manifestaron a medios de comunicación.
También conocida como EDAR (Estación de Depuración de Aguas Residuales), la planta requirió en su momento de una inversión cercana a los 10 mil millones de pesos y en la actualidad ha sido reconocida por la Asociación Latinoamericana de Desalación y Reuso de Agua (Aladyr) como “un hito mundial de la ingeniería sanitaria”.
Es, además, la más grande del mundo construida en una sola etapa y trata el 60 por ciento de las aguas residuales de la Ciudad de México y su zona metropolitana.
Cabe recordar que, en mayo del año pasado, la Secretaría del Medio Ambiente y Recursos Naturales en Hidalgo clausuró cuatro de las siete celdas del monorrelleno de la PTAR tras un monitoreo de la calidad del aire en el municipio que registró valores de metano superiores a los obtenidos a nivel internacional sin que la planta cumpliera con la implementación de medidas de mitigación destinadas a disminuir el mal olor, el gas metano y la fauna nociva.