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PACHUCA, Hgo., 16 de abril de 2023.- Primero los tenangos y ahora los diseños denominados Flor y Canto pertenecientes a la cultura hñahñu se encuentran en un predicamento ante la denuncia de una apropiación y explotación cultural de diseños que son heredados por generaciones y propiedad de estas comunidades indígenas.
Desde Carolina Herrera, Louis Vuitton, Mango, así como las mueblerías Pottery Barn se encargaron en los últimos años de hacerse de manera ilegal y controversial de aspectos culturales y artesanales de los pueblos originarios de Hidalgo, y ahora una empresaria se ha apropiado de estos rasgos identitarios con el apoyo de algunas dependencias estatales y de la propia presidencia municipal de Ixmiquilpan, denunciaron artesanos indígenas.
Es el caso de la empresaria Alejandra Real, quien presentó la muñeca Nxutsi la cual causó indignación entre artesanos indígenas del Valle del Mezquital, quienes interpusieron una queja ante las instancias correspondientes al denunciar plagio a su identidad cultural y patrimonial.
Bajo el nombre de los Artesanos del Valle del Mezquital, se lanzó apenas un pronunciamiento enérgico de protesta a la explotación cultural y expropiación indebida por medio de una muñeca por parte de un particular cuya intensión es la mercantilización de los rasgos de la cultura del pueblo y hñahñu, además de no representar a la misma comunidad indígena, toda vez que representa rasgos blancos y no de las comunidades originarias.
Advirtieron que ya existe ante este apropiamiento con signos a su cosmología, el registro ante el Instituto Mexicano de la Propiedad Industrial (IMPI) con la presencia de elementos de la cultura hñahñu que son conocidos como imágenes de Flor y Canto, situación en la que jamás fueron consultados los pueblos originarios.
Es ahí donde se abre la nueva disputa e inconformidad en Hidalgo ante un caso que ya se intentó aprovechar de manera comercial sobre un patrimonio inherente a los pueblos originarios de la entidad.
Respaldo del gobierno
Uno de los reclamos airados de los inconformes en esta nueva tropelía, es que hay respaldo de las autoridades del municipio de Ixmiquilpan por parte de su alcaldesa Araceli Beltrán Contreras, así como de la propia Secretaría de Desarrollo Económico y de la de Turismo estatal, junto a la Secretaría de Bienestar e Inclusión Social por medio de la Subsecretaría de Participación Social y Fomento Artesanal a cargo de Claudio Márquez Camacho.
Bajo esta denuncia pública, se indicó que la muñeca “pirateada” contó con el respaldo del gobierno a través de sus dependencias que la presentaron como una “muñeca embajadora” de Hidalgo, donde se reiteró el reproche de que jamás se les consultó y que la persona que trae este proceso de propiedad ni siquiera es perteneciente a la comunidad hñahñu.
Responde Nxutsi
Por medio de la cuenta oficial de este proyecto de la muñeca que ya causa polémica, refiere ante las acusaciones que “es un proyecto que nace con la intención de promover nuestra cultura y generar fuentes de empleo para las artesanas del Valle del Mezquital, como parte del amor por nuestra tierra”.
Es así que califica las denuncias de los artesanos del Valle del Mezquital como información incorrecta respecto al objetivo y ejecución del proyecto, pues si bien sí existe un registro ante el IMPI “este solo aplica al logotipo y como parte del empaque de Nxutsi.
“Cabe resaltar que es muy común que varias empresas de la región también cuentan y emplean el denominado “Flor de canto” en el registro de sus logotipos ante el IMPI, sin que con ello tengan los derechos de explotación artística y cultural del mismo”, señalaron en su respuesta.
Abundó que, el diseño de la muñeca sí cuenta con registro como patente industrial, el cual no incluye los bordados artesanales, pues son textiles y del dominio público.
“Con esta aclaración queremos decirle a la ciudadanía de nuestra región y en especial a los artesanos y artesanas que al igual que ellos, Nxutsi busca impulsar nuestra identidad en el estado y en el país”.
Afirma la publicación que el proyecto no ha incurrido en ninguna violación artística y comercial contra el patrimonio cultural, por lo cual se encuentra en proceso el desistimiento la solicitud de registro de marca “Flor y canto”, a fin de no generar confusión en la propiedad de la iconografía.