En 18 mil pesos le salió parranda a edil de Ajacuba, detenido en Pachuca

PACHUCA, Hgo., 24 de octubre de 2022.- El alcalde de Ajacuba Francisco Leopoldo Basurto Acosta detenido hace algunos días en Pachuca luego de verse involucrado en un accidente automovilístico cuando se encontraba en estado de ebriedad pagó en total 18 mil pesos, así como 4 horas en la barandilla, confirmó el ayuntamiento capitalino.

Durante la rueda de prensa que cada lunes realiza el alcalde Sergio Baños Rubio, entre los tópicos referentes a los operativos de alcoholímetro, salió a relucir un evento reciente, sobre la detención del mandatario local de Ajacuba, detenido hace una semana durante la madrugada.

Ante el cuestionamiento de cuál fue el estatus del edil, el alcalde pachuqueño refirió que, sin distingo, se detuvo y se le llevó al área de barandilla, por lo que no existió influyentísimo para que saliera, por lo que, como todos, pagó su multa.

Ante la pregunta de cuánto pagó, intervino el secretario de Seguridad Pública, Tránsito y Vialidad de Pachuca Ricardo Aguilar Núñez para precisar que Francisco Leopoldo Basurto Acosta tuvo que erogar por la sanción un total de 11 mil pesos, mientras que su acompañante 7 mil pesos.
Abundó que el mandatario local permaneció entre 4 a 5 horas en la celda antes de salir tras la liquidación de su sanción.

Cabe recordar que Basurto Acosta fue detenido luego de verse involucrado en un accidente automovilístico la madrugada del pasado lunes sobre el bulevar Felipe Ángeles, esto en aparente estado de ebriedad, hecho donde se hizo acompañar de su hijo.

El alcalde fue detenido minutos después de darse a la fuga tras participar en un accidente automovilístico sobre el bulevar Felipe Ángeles a unos metros de donde se ubicaba el operativo alcoholímetro.

Ese día, la camioneta Jeep Cherokee color negra en la que viajaba el alcalde acompañado de su hijo, impactó a otro vehículo por lo que al orillarse ambos conductores a unos metros del operativo alcoholímetro para llegar a un arreglo, el edil se dio a la fuga y a punto estuvo de arrollar a policías y personas que se encontraban cerca del lugar.

Metros más adelante el político fue interceptado y detenido por agentes de la policía municipal, y tras bajar de la unidad los increpó de manera altanera, vociferando que era presidente municipal y que no lo podían detener.

Por ello, junto a su hijo fue trasladado a las galeras municipales, en donde permaneció solo unas horas tras pagar una multa por falta administrativa y llegar a un convenio con el otro conductor afectado.