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TULA DE ALLENDE, Hgo., 17 de marzo de 2022.- Damnificados de la inundación del pasado septiembre en el centro de la demarcación y nueve de sus localidades exigieron un trabajo responsable en el río Tula a la Comisión Nacional del Agua (Conagua).
Antonio Barrera, habitante de la Capital Tolteca y comerciante del centro, sostuvo que, luego de que la dependencia tuviera gran responsabilidad de la anegación del noveno mes del año anterior, lo menos que se le puede demandar es un trabajo que no resulte todavía más perjudicial para los tulenses.
El hombre, que perdió la totalidad de su mercancía en el establecimiento que tiene en la calle Zaragoza, dijo que se requieren de labores que garanticen que la localidad no se vuelva a anegar, pero también que respeten el medio ambiente y el derecho a la salud de los ciudadanos.
En este sentido, una residente más, María Hernández, expresó que se sabe que, la dependencia federal piensa que es necesario ampliar la capacidad del río de 250 a casi 700 metros cúbicos de agua negra por segundo para evitar los desbordamientos del río, lo que en sí, consideró, es una propuesta incongruente.
“No se puede hablar de seguridad contra inundaciones si en lugar de cerrar o disminuir el flujo de agua que se desemboca por el Túnel Emisor Oriente (TEO), nos van a incrementar a casi el triple de volumen que nos anegó y de paso se van a talar más de 410 árboles”.
La mujer reclamó que la Comisión Nacional quiera cometer un ecocidio similar al que se tuvo en 2017, y advirtió que, junto con la mayoría del pueblo de Tula no permitirán que se venga a destruir la casa una vez más, porque, aparte, significa mayor contaminación para Tula y por tanto mayores enfermedades para su gente.
Por último enfatizó que se permitirá que la dependencia y las empresas contratadas para limpiar el río Tula hagan libremente los trabajos de dragado y rectificación, pero no se les dejará retirar ni un solo ejemplar.