Caras y tardadas las correcciones del registro familiar en Tula

TULA, Hgo., 7 de diciemrbe de 2014.- Pese a que en la dirección del Registro del Estado Familiar de Hidalgo (REFH), las correcciones por errores en actas de nacimiento se cobran en 180 pesos, la oficialía del registro familiar de la presidencia municipal, pide a quienes acuden a hacer este trámite la cantidad de 400 pesos, además de recibir a los interesados de mala gana y tardarse más en entregar los documentos.

La cantidad, expuesta a los ciudadanos como un «apoyo», se ofrece en contraprestación para que se eviten perder el tiempo al tener que viajar a la ciudad de Pachuca a realizar la operación burocrática.

Recientemente entrevistado al respecto el titular del REFH, Martín Peralta Hermosillo, dijo desconocer tal práctica del gobierno tulense, realizada a través de la dirección local del Registro del Estado Familiar, presidida por Moroni Estrada Zúñiga.

No obstante el funcionario lamentó que las cosas se den de esta forma, cuando se supone que lo ideal sería que desde las autoridades municipales se proteja la economía familiar, debiendo cobrarse lo que es y no un costo extra.

Sin embargo dijo que el aumento que hace la alcaldía quizá es justificable si se toma en cuenta que quien acude a realizar el trámite por los tulenses a las oficinas del gobierno del estado en Pachuca, debe de pagar viáticos.

Pero sugirió que no debería ser así, pues se supone que cada que un servidor público de Tula acude a hacer una corrección, lleva varias, por lo que en ese sentido se economiza.

Por otro lado, puntualizó que las correcciones en actas de nacimiento quedan listas en un solo día.

Luego entonces, cabe resaltar que pese a ello, en la presidencia municipal tardan en entregar las correcciones hasta una semana, y cuando los ciudadanos acuden a preguntar por su documento en ocasiones son víctimas de malos tratos por parte de los empleados de la dirección en cuestión.

Peralta Hermosillo, fue cuestionado expresamente por este medio, del motivo por el cual los ciudadanos tenían que pagar por una serie de errores que ellos no habían cometido, a lo que respondió entre líneas que se trata de una responsabilidad compartida.

Pues el residente e interesado debe revisar en su momento que sus datos estén correctos, siendo que de lo contrario debe pedir al instante que sean corregidos, “también hay que tomar en cuenta que los errores se cometían hace mucho, cuando aún no se digitalizaban las actas, por lo tanto no es tampoco culpa de las autoridades actuales”, pormenorizó.