Rescata Profepa a jaguar en Pacula en estado de salud crítico
TULA DE ALLENDE, Hgo., 13 de marzo de 2014.-Vecinos de la colonia Alvarado, y las comunidades de Nantzha y San Andrés, (beneficiarios con la restauración de la carretera El Huerto – Nantzha), advirtieron al gobierno local que no recepcionarán la obra -ya casi concluida- hasta que no se garantice que el pavimento no continuará cuarteándose como hasta ahora.
Lo anterior durante entrevista en la que denunciaron que para la reconstrucción de la vialidad se utilizaron materiales de bajísima calidad, por lo cual aún antes de que inaugurarse ya presenta incontables fracturas en la superficie.
Fisuras que sin embargo no son visibles ya que empleados de la empresa a la que se le adjudicaron los trabajos, (presuntamente a Constructores Jaltocán), conforme van apareciendo las fisuras las subsanan con otra delgada capa de cemento.
Externaron diferentes comentarios de molestia por la lentitud de las labores, ya que los vecinos de la colonia de los maestros, Nantzha y San Andrés han tenido que ir a dar la vuelta desde hace al menos 3 meses por un camino empedrado para respetar el periodo de fraguado del nuevo pavimento.
Acusaron que esta disposición no la ha respetado el empresario José Guadalupe Garrido, supuesto consuegro del edil Jaime Jacobo Allende González, a quien presuntamente la alcaldía extendió un permiso para que entren y salgan unidades de carga y descarga de la destiladora que tiene en la zona de Las Manzanitas.
Estos vehículos dijeron los vecinos pesan más de 20 o 30 toneladas, y pueden ser causantes de las fracturas del pavimento, además de que la carretera se construyó con materiales de baja calidad.
Los vecinos se inconformaron al cuestionar: cómo es posible que se permita circular a estos camiones (con los logotipos de la compañía de Wine & Spirit) que exceden el peso y las dimensiones permitidas para circular en esta carretera que se supone aún no seca bien.
Lo anterior, se pueden verificar en un vídeo “subido” a las redes sociales, donde se aprecia a una unidad pesada como las antes descritas, la cual es escoltada supuestamente por dos patrullas de la secretaría de Seguridad Pública municipal y cuyo operador les dijo a un grupo de vecinos que para transitar por la nueva carretera contaba con permiso de la alcaldía.