Integrantes del cabildo de Ixmiquilpan renuncian al PAN
29 de enero de 2015
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16:16
Miguel Ángel Villeda/Quadratín Hidalgo
Ixmiquilpan, Hgo., 29 de enero de 2015.- El síndico hacendario del ayuntamiento Filemón de la Cruz Paredes y el regidor Vicente Mendoza Tomás de la comisión de Derechos Humanos hicieron pública su renuncia al Partido Acción Nacional y al Movimiento Indígena Otomí (MIO), agrupación del presidente municipal, Cipriano Charrez Pedraza, pero que encabeza el excandidato a diputado federal, Héctor Martín Napoles.
Según Filemón de la Cruz la renuncia «obedece a la necesidad de reagruparnos y formar un equipo de trabajo en favor de la sociedad, además no nos tomaban en cuenta», y acusó que a pesar de que aportan el 5 por ciento de recursos a la organización MIO «jamás nos han rendido cuentas».
Los disidentes advirtieron que ahora son un grupo opositor al gobierno municipal en turno, y sobre las críticas que lanzó el presidente municipal, Cipriano Charrez Pedraza, quien calificó de «flojos» a los regidores que se unieron en su contra, se limitaron a decir que “siempre hemos trabajado».
Señalaron que el alcalde no podrá sesionar con los nueve regidores que tiene de su lado, y recordaron que existe un documento solicitando juicio político contra Charrez Pedraza, el cual ya entregó al Congreso local debido a las acciones del edil.
Mendoza Tomás dijo que dicho documento se promoció debido a los atropellos cometidos contra los regidores, «ahora nos quitamos el término de opositores, porque no nos oponemos al desarrollo, estamos agrupados en pro de responderle a la sociedad”.
«No estamos peleados con el presidente municipal, solo buscamos abrir las puertas para beneficio de los ixmiquilpenses”, señaló.
Sobre su renuncia a la agrupación MIO, indicó:
“Hemos aportado el cinco por ciento desde hace tres años cada quince días, pero no hay cuentas claras, no sabemos a dónde se va ese recurso y con quién se gasta”.
Sobre su ausencia en la sesiones de cabildo, justificaron que “no podemos ir a una sesión de cabildo donde se arriesga la integridad física, donde no existe civilidad, ni respeto o tolerancia con los compañeros regidores».