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TULA DE ALLENDE, Hgo., 28 de junio de 2015.- Por incumplimiento de contrato, el ayuntamiento tulense demandará a la empresa que comenzó a colocar más de 30 lámparas ecológicas en las calles Vicente Guerrero y General Anaya, ya que de acuerdo al edil, el proyecto se dejó tirado.
Lo anterior, ya que el Ejecutivo local explicó que aunque la alcaldía pagó por adelantado cierto porcentaje por el inicio del proyecto, la firma que estaba colocando los dispositivos electrónicos (de la cual se reservó la razón social), simplemente abandonó el municipio.
De esta manera el edil reconoció que el propósito de colocar lámparas ecológicas en el municipio para ahorrar energía, quedará inconcluso, por lo menos a corto plazo.
De acuerdo a las proyecciones iniciales, los faros serían colocados como prueba piloto en la carretera Tula – Nantzha, en avenida La Carrera de la tercera Sección de La Malinche, así como en las avenidas Anaya y Vicente Guerrero de la segunda sección de Barrio Alto.
Para que si es que pasaban las pruebas de calidad, posteriormente proceder a colocarlas alrededor de todo el municipio; tuvieron una inversión inicial de 3.5 millones de pesos para más de 100 lámparas que se pretendieron colocar en las referidas vialidades.
Si los faros ahorradores tenían el rendimiento esperado, las lámparas convencionales de luz eléctrica serían sacadas de funcionamiento con lo que la demarcación hubiese ahorrado hasta el 40 por ciento de gasto corriente en energía eléctrica.