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TULA DE ALLENDE, Hgo., 25 de marzo de 2015.- La techumbre del jardín de niños Álvaro Obregón, no se ha concluido después de casi seis años, no por el incumplimiento de mi palabra, ni por presunto desvío de recursos que antes se señalaba, sino por oposición a la obra de la directora del plantel, Cruz María Martínez y de la presidente del comité de padres de familia, Sandra Quiroz Zúñiga.
Así lo sostuvo el regidor, Hugo Jiménez Flores, integrante del ayuntamiento tulense por el Partido Acción Nacional (PAN), en contra de quien presuntamente la tarde de ayer se manifestaron padres de familia de aquella institución por el supuesto incumplimiento de la palabra acerca de que él mismo terminaría de construir la techumbre del centro escolar.
En su defensa el munícipe argumentó con documentos en mano, que cuando se tuvo el dinero para los trabajos del programa 3 X 1 Paisano (que representó en su momento), los tutores del preescolar impidieron los la continuidad de las labores “porque les soltaron el rumor de que la obra estaba mal construida y en cualquier momento se caería” (sic).
Supuesto que, continúo, resultó ser totalmente falso, pues ante la situación, se pidió un dictamen del Instituto de Infraestructura Educativa de Hidalgo (Inhife), el cual avaló que la construcción estaba bien hecha.
Pero, insistió, por capricho de la directora y la presidenta de padres de familia no se continuaron las labores.
Por otra parte, también con documentación en mano, acreditó que en su momento del 100 por ciento del dinero que debían enviar los migrantes para poder allegarse de los recursos del 3 X 1 Paisano, no llegaron a juntarse ni 15 por ciento, y que lo poco que se juntó fue para edificar lo que hoy está en pie.
Aún así, indicó que aunque no tenía ni tiene la obligación de terminar la obra, dado que los migrantes no aportaron e dinero suficiente para tal efecto, hasta diciembre del año pasado, sostenía su palabra de encargarse de la totalidad de la obra, por bienestar de su comunidad.
“De hecho, el año pasado se lo estuve ofreciendo por varios meses a la directora y a la presidenta del comité de padres de familia pero de nuevo no quisieron, ahora por el capricho de ambas sólo ofrecí cubrir los gastos totales de la mano de obra, valuados en 20 mil pesos más o menos”, precisó.
Acerca del malentendido entre los padres de familia y su persona, finalmente se esperanzó: “ojalá y se cumplan todas las cláusulas del convenio al que se llegó entre autoridades municipales, ejidales y los padres de familia, de lo contrario, la construcción de la techumbre va a quedar en el tintero nuevamente”.