Rescata Profepa a jaguar en Pacula en estado de salud crítico
ATOTONILCO DE TULA, HGO. 23 de noviembre de 2017. Por lapso de al menos una hora, esta mañana, colonos del fraccionamiento El Pedregal, bloquearon en sus dos sentidos la carretera federal Jorobas – Tula ante la molestia generada por la falta de agua potable en sus viviendas desde hace al menos tres semanas, además de la falta de regularidad en los servicios de recolección de basura y cortes de energía eléctrica.
Sobre la falta de vital líquido dijeron que la padecen desde hace seis años, desde el momento en que el alcalde Julio César Ángeles Mendoza, durante su primer periodo de gobierno decidió recepcionar el fraccionamiento sin antes haber garantizado la suficiencia de servicios para sus habitantes.
Acerca de la recolección de basura expresaron que en ocasiones los camiones de basura dejan de pasar hasta por un mes, lo que ya es insostenible pues se generan severos problemas de salud pública, en tanto que de los cortes de energía reclamaron que se deben al adeudo de 42 millones de pesos que el ayuntamiento mantiene con la Comisión Federal de Electricidad.
Con todos las problemáticas que se viven en su colonia, los residentes se quejaron de que el mandatario atotonilquense no se tome la molestia de acudir a ver las necesidades que se tienen, y reprocharon que el presidente municipal sólo tuvo la cara para ir en campaña y prometerles cosas que a la fecha no ha cumplido.
Del tema concreto del agua ampliaron que acudieron hace dos meses y medio a la Comisión de Agua, Alcantarillado y Saneamiento de Atotonilco (CAASAT), y que les prometieron que en dos meses se solucionaría el desabasto, pero que no han hecho nada, “ni iniciado el proyecto, ni nada”.
Para liberar el tránsito vehicular fue necesario que una comitiva se trasladara a la presidencia municipal a entablar dialogo con el Ejecutivo, quien comprometió la construcción de un nuevo pozo debido a que, con los que cuenta el municipio ya resultan insuficientes.
La falta de palabra del mandatario local es un asunto que cada día cobra mayor fuerza, pues el grueso de atotonilquenses reprochan que carecen de alumbrado público, de recolección de basura, falta de agua potable en sus hogares y del crecimiento en la inseguridad, y sobre todo en delitos de alto impacto.