PACHUCA, Hgo., 29 de junio de 2015.- En Hidalgo se está tan acostumbrado al status quo, que de vez en cuando uno lee algunos comentarios fuera de lugar, respecto a lo que ya se especula en Hidalgo, la sucesión del poder ejecutivo. Alguien se preguntaba si había alguna posibilidad de tener en Hidalgo, un gobernador de oposición.
Me dije, ah cabrón, ¿y eso cómo sería?; una vez que un partido o persona gana, es gobierno no oposición, los que no ganaron incluidos en su caso, los que estaban en el poder pasan a ser la oposición. No existe la figura de gobernador de oposición, es un contrasentido bárbaro, pero entendible en una Entidad que no conoce la alternancia.
Es así, que en su inmensa mayoría, todos especulan de quien será el candidato o candidata al gobierno de Hidalgo, por el PRI. De los partidos de oposición, algunos se ocupan como de pasada, nomás por no dejar; no hay culpa de nadie, es simplemente un reflejo de la realidad estatal.
Los partidos de oposición en Hidalgo no han creado, ni dejado surgir alguna figura política que sea vista como un serio aspirante a disputar el poder, así las cosas, por ejemplo, las tres personas que compitieron en las elecciones recientes, no han surgido del trabajo en sus partidos, Xóchitl Gálvez, llegó del DF, después de una vida exitosa como empresaria y funcionaria del gobierno de Fox, sin militar en el PAN; José Guadarrama, con toda una vida en la administración pública, pero dentro del PRI; Francisco Javier Berganza, montado en su popularidad como cantante juvenil de baladas románticas. El último aspirante serio con militancia partidista fue Benigno Aladro del PAN.
No se trata de encontrar culpables, pero si de señalar realidades, las escasas figuras que han podido surgir en la oposición, han sido aplastadas, silenciadas, marginadas o ignoradas. Así en Hidalgo como en otras Entidades, las pláticas al interior son a la espera de que ocurra un milagro y que alguien de los muchos que aspiran en el PRI se inconforme y rompa con ellos, para que se aviente a los brazos de la oposición, esas son sus expectativas. Porque los que pudieran ser aspirantes internos están muy chiquitos (eso dicen sus propios compañeros): Isidro Pedraza en el PRD, el Profesor Guadarrama, muy lejos de sus buenos tiempos; por el PAN han subido al diputado Erick Rivera y al alcalde de Tulancingo, Julio Soto; A Moisés Jiménez, se le agoto la posibilidad, al quedar fuera de Nueva Alianza, ahora este partido, no tiene a nadie. Y así le podemos seguir, con Movimiento Ciudadano, Encuentro Social, Partido Verde a la espera de sumarse al que postule el PRI. Y ahí termina la historia.
Solo falta saber si Morena, pudiera dar la sorpresa. Después de su desempeño en las contiendas estatales que acaban de pasar, poco se puede esperar, en ninguna Entidad dieron la pelea, pero… siempre puede brincar la liebre, y no necesariamente por donde algunos esperan, imploran y prenden su veladora.