Buitres en la ciudad

¿Dónde están los permisos para el Centro Cultural El Reloj?

PACHUCA, Hgo., 11 de septiembre de 2015.- Lo que es hacer las cosas sin tener idea. En la ciudad de Pachuca, México, su alcalde Eleazar García Sánchez (PRI), ha dicho que para diciembre estará construido lo que llama “Centro Cultural El Reloj”, una obra de 110 millones de pesos, sobre la principal plaza de la ciudad, la Plaza Independencia, la cual alberga el Reloj Monumental, principal patrimonio artístico de todo el Estado de Hidalgo.

Pero hay un problemita: ninguna autoridad, ni el Instituto Nacional de Bellas Artes (INBA), ni el Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) le ha dado los permisos para eso. Pero eso sí, ya escarbó toda la zona y la tiene básicamente derruida.

Y no hizo falta ninguna tarea de investigación tipo “La casa blanca de Peña Nieto” para saberlo. De hecho, bastó con que el Comité de Seguimiento de las obras, a cargo del funcionario municipal, Luis Corrales Vivar, lo reconociera.

Esto ocurrió:

El pasado jueves 13 de agosto se reunieron en la sede del Consejo Consultivo Ciudadano de Hidalgo (CCCH), el Comité de Seguimiento a cargo de Luis Corrales, junto con el Comité del Centro Histórico de Pachuca, una organización reconocida por la alcaldía para conocer, opinar y proponer en torno a las obras públicas y proyectos de rescate y restauración de, como su nombre lo indica, la zona más antigua e histórica del lugar. Ahí, la parte oficial, reconoció que el Gobierno municipal, ni el gobierno del Estado de Hidalgo, cuentan con proyecto para el diseño de la segunda etapa de las obras de remodelación de la Plaza Independencia; es decir, que ya anunciaron el “Centro Cultural El Reloj”, pero no tienen ni maldita idea de lo que van a hacer ahí. ¿Qué se deduce de esto? Que si no tienen proyecto, tampoco tienen los permisos del INBA ni del INAH, los cuales tienen como requisito la presentación de un plan formal para autorizar cualquier obra de este tipo.

De hecho, la única instancia que tiene conocimiento de la obra es el Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur), la cual le ha invertido 50 millones de pesos, según declaraciones del gobernador hidalguense, Francisco Olvera Ruiz. Tanto conocimiento tiene, que el Comité de Seguimiento dijo en esa reunión que “no tiene ninguna decisión, ni conoce el proyecto de la segunda etapa y mucho menos de la tercera etapa que corresponde al mantenimiento del reloj”, reveló el Comité del Centro Histórico.  En ese sentido, las decisiones en torno a la construcción del Centro Cultural El Reloj “tampoco parecen incumbir a la Presidencia municipal”, subrayó.

Uno de los miembros del Comité de Seguimiento, un ingeniero de nombre José Luis Gallego Hernández informó que el conocimiento del proyecto sólo será posible hasta el fin de este mes de agosto, y que las obras deberán ser concluidas en diciembre de este año. No obstante, en declaración a medios, el gobernador Olvera informó que las obras estarán concluidas hasta 2016 Y luego, ¿a quién le creemos, pues?

La buena noticia (¿qué tiene de buena en medio de este desastre?) es que el quiosco artístico que la Presidencia Municipal quería derribar, ya no pudo ser y pues se queda. ¿Por qué? Adivina. Sí, no hubo proyecto que justificara su destrucción y pues el INBA no le dio permiso alguno.

Otro ejemplo de cómo se ha destruido la Plaza Independencia sólo por capricho. Y por si faltaran botones de muestra, el Comité del Centro Histórico precisa que de lo que se quería o se dijo que albergaría el  Centro Cultural del Reloj, algunas cosas ya no van, Por ejemplo, el área del restaurante es más grande que ludoteca, el espacio para bailar corresponde a un aforo de 200 personas;  y desapareció, afortunadamente, el proyecto de “vinoteca”, que quería el alcalde Eleazar García, quizá porque le gusta entrarle al chupe de uva, ya que HIdalgo ni su capital Pachuca, tienen tradición vinícola.

Un día hace cinco años, la organización Transparencia Mexicana dijo que HIdalgo es uno de las entidades de México donde más corrupción política hay. Por su parte, especialistas como la investigadora María Amparo Casar, señalan que esto permea en el manejo institucional de un Gobierno. Si esto es cierto, se puede decir ¡con razón! O en todo caso, no es que hagan las cosas con las patas, sino que en el caso de la remodelación de la Plaza Independencia, la urgencia de sacar dinero le vino al Gobierno con la idea de sacarlo por debajo de las piedras, literalmente, y con ello destruir uno de las principales plazas públicas de México.

Twitter: @albertobuitre

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