(W) Ecos Sindicales: Razonamiento Matemático
PACHUCA, Hgo., 3 de febrero de 2015.- Inmediatamente después del pasado 20 de noviembre, fecha en que el presidente Barak Obama anunció lo que oficialmente se nombró como medidas ejecutivas en inmigración, el Servicio de Inmigración y Ciudadanía (USCIS por sus siglas en inglés) se alistó para comenzar a aceptar lo que literalmente será un rio de solicitudes que comenzaran a recibirse en dos fechas, febrero para el programa de “acción diferida para los llegados en la infancia”, DACA y mayo para DAPA, dirigido a quienes sean padre o madre de un hijo ciudadano o residente legal de los Estados Unidos entre otros requisitos.
En ambos casos se debe cumplir con varios otros puntos entre los cuales destacan no haber cometido delitos o algunas faltas menores, o haber vivido en ese país continuamente desde el 1° de enero de 2010. Derivado de esta circunstancia y solo como muestra, en California que es el estado con mayor población mexicana indocumentada, se calcula que 1.6 millones de personas estarían en posibilidad de beneficiarse de estas medidas que si bien no son solución definitiva, si representan una bocanada de aire ante la situación tan apremiante en esta materia, pero más allá de esta consideración que se centra en la parte humana, los números demuestran también que la economía estadounidense se verá revolucionada con este proceso.
La Casa Blanca estima que el PIB tan solo de California, crecerá entre $11 y $27.5 millones en 10 años por las medidas ejecutivas y en todo el país, el aumento del Producto Interior Bruto (PIB) será de entre $90 mil a 210 mil millones, de acuerdo con el estudio elaborado por el Consejo de Asesores Económicos del Obama, con lo que su segundo y último periodo presidencial estaría cerrando con un marcado crecimiento económico y situando a los E.U.A. nuevamente a la vanguardia mundial por encima de su feroz competidor, China.
Como parte de la puesta en marcha de las nuevas directrices sobre las deportaciones, los agentes de la Patrulla Fronteriza (CBP) y de Inmigración y Aduanas (ICE) deberán identificar de inmediato a los indocumentados bajo su custodia que puedan beneficiarse de los alivios migratorios.
Jeh Johnson, secretario del Departamento Seguridad Nacional (DHS), había notificado el pasado 20 de noviembre a los agentes federales sobre las directrices que dan prioridad a la deportación de indocumentados con antecedentes criminales, a los que reingresan ilegalmente a la nación vecina, y a los que sean considerados una amenaza para la seguridad fronteriza, pública o nacional.
Ya están en proceso de distribución los materiales de capacitación para los agentes sobre el tema, cumpliendo con la indicación de que debían recibir antes de la puesta en marcha de las nuevas directrices a principios de este mes.
El estudio y conocimiento de estos contenidos explica a los agentes federales de ICE y CBP a cómo identificar de inmediato si los detenidos califican para los alivios migratorios, evitando así que aumenten las deportaciones de quienes si tienen oportunidad de acceder a este beneficio.
En la actualidad, los agentes de CBP ya interrogan a los indocumentados que arrestan en la frontera para determinar si califican para solicitar asilo.
La Administración Obama dejó en claro que los alivios migratorios aplicarían tanto para las personas ya detenidas como para aquellas que se encuentren en proceso de deportación -siempre y cuando reúnan todos los requisitos-. Bajo las nuevas directrices, los indocumentados detenidos en la frontera siguen siendo una máxima prioridad para las deportaciones.