Ráfagas: ¿Malos manejos en la Comisión de Búsqueda de Personas?
PACHUCA, Hgo., 4 de mayo de 2015.- La elección federal que avanza ahora mismo en nuestro país, presenta una prueba totalmente inédita para el Partido Nueva Alianza(Panal), dada la condición de orfandad en la que se encuentra ahora que el Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación(SNTE), ya no patrocina su accionar.
En Hidalgo hay una doble condición de abandono para el Panal, además del desamparo en que los dejó el encarcelamiento de Elba Esther Gordillo, la misma suerte le siguió a la dirigente local Mirna García. Procesos que sirvieron de escarmiento para otros prominentes líderes como Moisés Jiménez y Alejandro Soto.
Hoy, la sección XV del SNTE no respalda de la misma forma a los candidatos de Nueva Alianza, simplemente no hay preocupación por mantener a esta expresión política como un adversario del oficialismo priista.
Esta confianza tricolor es bien fundamentada pues tras el cisma en la dirigencia de la sección XV, ubicaron como secretario general a un pelele del sistema que casi al finalizar su periodo aún no puede ganarse la confianza del magisterio hidalguense que en general lo repudia por su incompetencia e improvisación. Sinuhé Ramírez ni siquiera entiende el funcionamiento de una escuela, menos de un sindicato o el juego del poder político de un estado.
Los candidatos a diputados federales del Panal no tienen (como en el pasado reciente) en sus alforjas plazas, horas ni ningún otro beneficio que ofrecer a los profesores a cambio de sus votos.
Ya ningún maestro hará “turismo electoral” falseando datos para simular domicilios en distritos ajenos, sólo para inflar la votación en favor de alguna fórmula del Panal.
Esta elección, es casi un hecho, Nueva Alianza le dirá adiós a su posición en el medallero electoral hidalguense y es muy probable que su registro esté en riesgo debido a la escasa votación que se espera para ellos.
Lamentable es que un partido joven dejará tan pronto y tan abruptamente de ser útil al status quo de México e Hidalgo; pero es más vergonzoso que en la escena política ya existan hasta tres expresiones similares sólo a la espera de un guiño para prestarse al trabajo de patiño o comparsa del poder.