Subestimando a la presidenta
Sabido es que las elecciones intermedias son menos animadas, con baja participación ciudadana y en consecuencia una reducida votación que no supera los 50 puntos porcentuales del número de ciudadanos llamados a votar. Y esta vez, el 6 de junio, parece que no será la excepción.
¿A quién beneficia este fenómeno?
Sin duda que a los partidos con mayor organización, con estructura sólida y con militancia leal. En Hidalgo el único partido que cubre esas condiciones es el Revolucionario Institucional (PRI), seguido del de la Revolución Democrática (PRD) y de Acción Nacional (PAN).
Los partidos de nueva creación difícilmente cubren ese perfil y su apuesta es a alcanzar al menos el tres por ciento que obliga la ley para no perder su registro como partido político. Algunos como el Verde Ecologista, Nueva Alianza y Encuentro Solidario, han sabido operar para alcanzar espacios de representación popular, merced a su base electoral. Los primeros con gobiernos municipales desde hace varios años.
Nueva Alianza soporta su fuerza en el magisterio estatal, aunque ahora se reparte las simpatías de los profesores, con otros partidos como Redes Sociales Progresistas (RSP), Podemos y hasta con el PRD y PRI. Hasta hace unos años, este último tenía la mayoría de maestros de su lado, gracias a esos acuerdos cupulares que obligaban al voto corporativo a favor del gobierno en el poder.
Fuerza por México, es un partido de reciente creación que se considera a nivel nacional como el “plan B” del gobierno federal, debido a los yerros que se cometen con regularidad en Morena, el partido creado por el presidente de México, Andrés Manuel López Obrador.
Su creador, el senador Pedro Haces, dirigente de la CATEM, la versión 4T de lo que fue la CTM en tiempos de gobiernos priistas, ha construido una fuerza política que podría desbancar a Morena, en todo el país y es por ahora el “Morena Bis”, al que han acudido aquellos a quienes les han cerrado las puertas en Morena, aquí en Hidalgo, donde el partido ha sido secuestrado por el Grupo Universidad.
Así pues, que por lo que se observa, es muy probable que la votación no supere el 50 por ciento del padrón electoral, con lo que se alzaría con la victoria el abstencionismo y eso beneficiaría directamente a los partidos con mayor estructura y son, curiosamente, los que se han aliado para alzarse con el triunfo el 6 de junio, cuando acudiremos a votar por siete diputados federales y 30 diputados locales, 18 de ellos de mayoría relativa y 12 de representación proporcional.
En la coalición “Va por Hidalgo”, que cambió en la propaganda a “Juntos Somos más Fuertes”, hay confianza en que ganarán la mayoría en el Congreso local y desbancarán a Morena, que hoy con sus 17 diputados controla el poder legislativo; y en el plano federal, van por al menos cuatro de las siete diputaciones en juego.