No alcanza
El gobernador de Hidalgo, Omar Fayad Meneses, forma parte de una lista de militantes históricos del Partido Revolucionario Institucional (PRI), que no aparecen en la lista de un millón 398 mil 536 militantes de ese partido. Además de él tampoco figura el ex gobernador Jesús Murillo Karam.
Estos datos se desprenden de una investigación periodística realizada recientemente por el diario Excélsior, que da cuenta de alrededor de varios ex presidentes y ex gobernadores, quienes ya no figuran teóricamente como militantes del PRI.
También quedaron fuera otros personajes como la senadora de Hidalgo, Nuvia Mayorga Delgado.
En la lista de “desaparecidos” del padrón de militantes, también figuran los ex presidentes Luis Echeverría, Ernesto Zedillo y Carlos Salinas, así como los ex candidatos Francisco Labastida y Roberto Madrazo; los gobernadores de Hidalgo y Oaxaca, Omar Fayad y Alejandro Murat, las senadoras Sylvana Beltrones y Nuvia Mayorga; los ex gobernadores Manuel Angel Núñez Soto, Humberto Lugo Gil (+), Adolfo Lugo Verduzco y Francisco Olvera Ruíz.
Este asunto podría quedar en lo anecdótico y quizá no genere inquietud en la militancia priista, pero, lo que sí debe preocuparles es que en un lapso de tres años el tricolor ha perdido el 78 % de su militancia, al pasar de6.4 millones en el 2018 a 1.2 millones en el 2021.
La pérdida de militantes se dio principalmente en los estados de Aguascalientes, Baja California, baja California Sur, Chihuahua, Jalisco, Morelos, Puebla, Querétaro, Quintana Roo, Sonora, Tabasco, Tamaulipas y Veracruz.
Las únicas entidades donde hubo un aumento de militantes fueron Coahuila y Guerrero.
No sólo el PRI perdió militancia en los últimos tres años, también al PRD lo abandonaron 3.8 millones de sus militantes originales y al PAN, lo dejaron 128 mil personas. El púnico partico que registró un aumento fue el Verde Ecologista, con 341 mil más.
Hidalgo, de acuerdo con su dirigencia estatal, recuperó terreno entre el 2018 y el 2021 al pasar del 19 al 27 % de votantes, lo que le hace pensar en que la tendencia hacia la recuperación de la confianza ciudadana va por el rumbo correcto, especialmente ahora que los partidos políticos se preparan para el relevo en el poder ejecutivo estatal y algunos como el propio PRI y Morena, ya barajan nombres de sus posibles aspirantes.
En fantasma de la alternancia en Hidalgo, sigue rondando y se agudiza con datos como los anteriores, que no permiten ver a un PRI imponente como ocurrió en otros tiempos cuando su hegemonía le permitía controlar los poderes ejecutivo, legislativo y judicial, además de gobernar una mayoría de los 84 municipios.
Hoy el panorama se le presenta adverso. Aunque como los propios priistas dicen: nosotros sabemos ponernos de acuerdo y salir fortalecidos a las contiendas constitucionales, especialmente a la de gobernador, y ésta no será la excepción.
Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.