Ráfagas: Tatiana Ángeles, cuentas pendientes
El Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), cuya tarea principal es defender los intereses laborales y económicos de sus agremiados en el país, ha decidido sumare a la decisión del gobierno federal de iniciar clases presenciales en todo el país, aunque en ello vaya el riesgo de contagio de miles de trabajadores de la educación. De hecho aquí en Hidalgo, ya hay casos de personas contagiadas, apenas los primeros días de clases presenciales.
Para ello, el secretario general, Alfonso Cepeda Salas, ordenó a los comités seccionales en el país, que sus integrantes recorran escuela por escuela para determinar las condiciones en que cada uno se encuentre y reportar las necesidades que detecten a las autoridades en sus tres niveles, con el propósito de que esos espacios operen en óptimas condiciones para reducir al máximo el riesgo de contagio entre alumnos, maestros, padres de familia y personal de apoyo que ya volvieron a las aulas de manera presencial.
Aunque, el gobierno de Hidalgo y sus autoridades sanitarias tienen otros datos y han determinado que en los siguientes 14 días evaluarán el inicio del ciclo escolar 2021-2022 que se dio de forma presencial en 15 municipios considerados de bajo riesgo, pero con malta población en condiciones de pobreza y pobreza extrema.
De hecho, de los 848 planteles donde se iniciaría el curso de manera presencial, en 306 escuelas, los comités de padres de familia decidieron que no había condiciones para tomar clases presenciales y decidieron posponer el envío de sus hijos a las aulas.
Además, el riesgo de contagio por Covid en sus diferentes variantes sigue latente y un contagio masivo es probable y con ello un mayor daño a los involucrados en el regreso a clases presenciales.
No obstante, el secretario general del SNTE, considera en su respaldo a la iniciativa presidencial de iniciar el ciclo con clases presenciales, dar marcha a una jornada nacional de apoyo al regreso seguro a las escuelas, para propiciar el regreso en orden y con responsabilidad de acuerdo a las condiciones para reemprender la tarea educativa.
El confinamiento, que se ha prolongado por más de año y medio, dice el dirigente sindical, frena el desarrollo y la formación educativa, además de la salud y estabilidad emocional y mental de los educandos, por eso, agrega, es necesario reducir el estrés y la ansiedad por el confinamiento, además de reducir los riesgos por la pérdida de aprendizaje y acotar las brechas educativas que agravan fenómenos como la pobreza, desigualdad, exclusión y violencia social.
Contra la buena voluntad y alineamiento del SNTE a las decisiones del gobierno de Andrés Manuel López Obrador, está también la otra realidad, la del aumento de contagios que para el caso de nuestro estado, hasta ayer sumaban 54 mil 489 confirmados, 8,508 sospechosos y 6 mil 840 defunciones.