
Ecos y Huecos Sindicales / Cortes y Bravo
El ex dirigente magisterial, Sergio Hernández Hernández, rindió protesta hoy como nuevo presidente del Partido Nueva Alianza Hidalgo (Panalh), con lo que se resolvió el conflicto interno que genero su antecesor, Juan José Luna, luego que pretendió mantenerse en la dirigencia partidista, ser diputado local y en diciembre aspirar a la secretaría general de la sección 15 del SNTE, pretensión que incomodó a quienes mantienen el control político del magisterio y del partido político.
Fue en un acto discreto, sin prensa, en el que el originario de Botibaji, municipio de Actopan y de larga trayectoria en la vida sindical del magisterio hidalguense y en espacios de poder político, asumió la presidencia, que se consensó semanas atrás con el secretario general de la sección 15 del Sindicato Nacional de Trabajadores de la Educación (SNTE), Luís Enrique Morales Acosta y su antecesor, Francisco Sinuhé Ramírez Oviedo.
Hernández Hernández, fue dirigente magisterial durante el gobierno de Jesús Murillo Karam (1993-1997) y luego se incorporó a tareas en la administración pública, como funcionario de la Secretaría de Desarrollo Social, como director del Museo El Rehilete.
Cuando pretendió ser candidato a diputado federal por el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y le cerraron el paso, se postuló como abanderado del Partido de la Revolución Democrática en el 2005 y contendió contra la dupla que formaron Raúl González Apaolaza y Valentín Zapata Pérez. El primero dejó la Secretaría de Educación Pública (SEP) y el segundo tenía ascendencia en el magisterio estatal, por lo que se pensaba que era una fórmula triunfadora.
Al final, les ganó Sergio Hernández, quien posteriormente se sumó al Panal y fue su representante ante el Instituto Estatal Electoral, de donde pasó a formar parte del cuerpo de asesores de ese partido y le cayó como anillo al dedo, la coyuntura provocada por Juan José Luna Mejía, quien a querer o no, le abrió el camino a la dirigencia del Panalh, único partido que mantuvo su registro local y que podría alcanzar hasta cuatro escaños en la LXV Legislatura local, tres de mayoría relativa y uno plurinominal, que precisamente le estaba asignado a Luna Mejía.
Queda la incógnita respecto del futuro de quien desde el 2018 asumió la presidencia del Panalh y terminó defenestrado, con acusaciones de sus propias compañeras por violencia política de género y por el poco claro manejo de alrededor de cuatro millones de pesos, propiedad del partido, cuyo destino no se conoció con precisión.
No hay que pasar por alto que para los comicios del pasado 6 de julio, el Panalh se alió a Morena en la elección de candidatos a diputados federales, y no se ha precisado si continuará esa alianza para los comicios del próximo año, toda vez que el magisterio sigue siendo un sector políticamente muy apetecible si consideramos que en ese segmento social se aglutinan 56 mil trabajadores de la educación.