Ráfagas: Tatiana Ángeles, cuentas pendientes
ITINERARIO POLÍTICO
Algo grave, o muy grave, está ocurriendo entre la sociedad mexicana. Y es que a pesar de que día a día se incrementa el número de militares, marinos y guardias nacionales en la calle, no se reduce la violencia y el crimen sino que se agudizan los actos terroristas.
Y en medio de esa impensable paradoja –del incremento del terror a pesar del mayor número de fuerzas castrenses en la calle–, la mayoría de los medios y de la sociedad parece indiferente a las masacres en México mientras se escandalizan de las matanzas allende la frontera norte.
Más aún, el presidente mexicano lamenta la masacre ocurrida en Texas, que costó la vida de 18 personas, pero ignora el acto terrorista cometido en Celaya, que mató a por o menos 11 civiles, ocho de ellas mujeres.
Así, en los hechos se cumple la máxima de otro populista, también de apellido López; el entonces presidente José López Portillo, quien dijo: “lo peor que nos puede pasar es convertirnos en una sociedad de cínicos”.
Y las opiniones pueden ser compartidas, debatidas y hasta rechazadas, pero los datos duros no sólo confirman el escandaloso fracaso de la lucha contra la violencia y el crimen mientas que los hechos ratifican día a día que el cinismo es la verdadera política de Estado del gobierno de AMLO.
Pero si dudan que el terrorismo ya está entre nosotros, van las pruebas.
1.- Apenas la tarde del pasado lunes 23 de mayo un comando de al menos 20 personas prendió fuego a un hotel y un restaurante de la colonia Linda Vista, de Celaya, con un saldo de por lo menos 11 personas muertas, ocho de ellas mujeres y decenas de heridos.
Una masacre más que, sin duda se tipifica como acto terrorista, ya que el objetivo central era atemorizar a la población y a los dueños de negocios que han aceptado el pago de piso a un cartel contrario al de Santa Rosa de Lima, que domina buena parte de El Bajío.
A pesar de la gravedad del lo ocurrido, las víctimas no merecieron siquiera un responso del presidente López Obrador quien, en cambio, si lamentó la masacre ocurrida horas después en Texas, con un saldo de 18 muertos, 14 de ellos menores de edad.
2.- El mismo lunes se difundieron videos –obtenidos de drones–, del momento en que son lanzados artefactos explosivos contra campamentos de supuestos “autodefensas” en Tepalcatepec, Michoacán.
Los ataques terroristas –que en ocasiones también son lanzados contra militares y ciudadanos indefensos–, fueron reivindicados por el grupo criminal motejado como CJNG.
3.- A su vez dieron la vuelta al mundo las imágenes de estudiantes de una escuela de Culiacán, la capital de Sinaloa, en las que aparecen decenas de estudiantes tirados en el piso –en posición pecho tierra–, en el momento en que en la calle se enfrentan la Guardia Nacional y un grupo criminal identificado como parte del Cártel de “El Chapo”.
Los hechos ocurrieron en la colonia Las Quintas, en donde numerosas escuelas y comercios debieron poner a los ciudadanos a resguardo, ante la ola de violencia incontenible que ya no se da en la sierra de Sinaloa, sino en plena capital del estado.
4.- De igual manera, entre la noche del lunes y la madrugada del pasado martes la capital de Guerrero, Chilpancingo, fue víctima de actos terroristas provocados por grupos criminales que lo mismo quemaron vehículos, que dispararon contra transformadores de energía eléctrica y dejaron en penumbra buena parte de la capital de esa entidad.
El terror fue la respuesta de un grupo criminal que repudió la detención de uno de sus líderes.
5.- En la Ciudad de México los ajustes de cuentas y el terror no paran, mientras que la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum, sólo parece ocupada en su precampaña presidencial.
El mismo lunes, en la Calle Durango, de la Colonia Roma, un solitario matarife que viajaba en una motocicleta llegó a un despacho de abogados para dejar un supuesto paquete.
Una vez que frente al destinatario, sacó una pistola y mató de varios disparos al profesionista, junto con dos mujeres. Salió como si nada y se fue en su motocicleta, con el rostro cubierto por el casco.
6.- Ayer mismo, el diario Reforma dio a conocer que –contrario a los informes mentirosos de Palacio–, en la capital del país la violencia criminal está fuera de control y los números revelan que el de Claudia Sheinbaum es el peor gobierno en criminalidad, de las últimas cinco gestiones.
El citado diario reporta que en los primeros 40 meses de la gestión de la señor Sheinbaum, se han registrado cuatro mil 36 homicidios dolosos, mientras que en el mismo lapso del gobierno de Miguel Mancera se cometieron 2 mil 717 asesinatos; dos mil 509 con Marcelo Ebrard y dos mil 580 con AMLO. En pocas palabras, el terror que se vive en la capital del país no tiene antecedentes.
7.- Días antes, en Puebla, fue acribillada a balazos, Cecilia Monzón, luego de salir de su casa, a plena luz del día y con total impunidad.
Un grupos de hombres que viajaban en sendas motocicletas emboscaron a la activista contra la violencia de género, quien había pedido protección oficial, de manera reiterada, ante las amenazas de muerte que recibió por distintos actores políticos.
8.- También el pasado fin de semana, en el municipio de El Espinal, en Veracruz, Valeria Atzín Maldonado –quien se desempeñaba como mesera del restaurante El Dorado–, fue acribillada a tiros por un comensal.
La tarde del pasado domingo un hombre llegó al lugar, pidió de comer, puso música y repentinamente le exigió a la mujer que bailara con él.
Valeria se negó. El hombre volvió a su vehículo, sacó una pistola y la mató frente al resto de comensales. Nadie hizo nada y la policía no lo detuvo, a pesar de que la comandancia municipal se localiza a pocos metros del lugar.
9.- De nueva cuenta el fin de semana, ahora en la autopista México Querétaro, un grupo criminal colocó retenes ilegales que por la noche detuvieron el tránsito vehicular. El “atasco” fue aprovechado por un comando criminal que en pocos minutos asaltaron a decenas de vehículos.
Algunas fuentes señalaron que se trató del mayor asalto de la historia; 300 vehículos de manera casi simultánea.
10.- Todo lo anterior mientras que, según el diario El Universal, sólo en los primeros cuatro meses del 2022 el número de fuerzas castrenses desplegadas en las calles de todo el país se elevó de casi 94 mil, a 124 mil efectivos.
En pocas palabras, a más fuerzas castrenses en las calles, más actividad criminal y, sobre todo, más actos terroristas.
Sin duda que algo muy grave está ocurriendo en México, en donde el terror se apodera del país, ante la indiferencia oficial y ciudadana.
Al tiempo.
Las opiniones y conclusiones expresadas en el artículo son de exclusiva responsabilidad del autor y no necesariamente reflejan la posición de Quadratín.