Ráfagas: ¿Malos manejos en la Comisión de Búsqueda de Personas?
Twitter: @OswaldoRamirezG
<<Las naciones, así como los individuos, son castigados por sus transgresiones>>
Ulysses S. Grant. Ex presidente de los Estados Unidos, 1869-1877.
Los penosos acontecimientos en los que perdió la vida un anciano de origen mexicano el pasado 4 de julio producto de un tiroteo en Highland Park, Chicago Illinois, cuando asistía al desfile que conmemora el aniversario de independencia de Estados Unidos reviven y se suma al monstruo de cuyas fauces padece la sociedad estadounidense: la legalización y compra de armas. Esta masacre se agrega a la lista de un largo etcétera de la que destacan la de Uvalde Texas (24 de mayo de 2022), Parkland, Miami el día de San Valentín (14 de febrero de 2018), Newtown Connecticut (14 de diciembre de 2012) y Columbine, Colorado (20 de abril de 1999). Tan solo el año pasado se registró un total de 692 tiroteos de los cuales por lo menos 28 tuvieron cuatro o más víctimas mortales (Fuente: GVA Archivo de Violencia con Armas web page www.gunviolencearchive.org/past-tolls).
No obstante, como Estados Unidos está en temporada bélica en Europa del este para la prensa occidental en su mayoría es conveniente generar “trend topics” a favor de una guerra que extraoficialmente ha perdido el gobierno fascista de Ucrania, pese a las intentonas de apoyo norteamericano y la OTAN. Se vislumbra como uno de los más grandes fracasos solo comparados con el conflicto en los Balcanes y la Guerra de Vietnam. Es un hecho que la infinidad de sanciones económicas hacia Rusia lejos de desplomar esa nación reafirman que el mundo como lo conocemos está a un paso de la multipolaridad pese a que occidente no lo quiera aceptar. Léase Rusia/China/India vs Unión Europea/Estados Unidos. Pero a lo que venimos ¿Tienen incidencia estas masacres con el creciente mercado de las armas, el supremacismo blanco y el declive imperialista de dicho país?
Históricamente hablando los últimos doscientos años Estados Unidos ha construido su nación en una defensa hipócrita de la libertad, encubriendo el saqueo y la imposición de regímenes políticos con su discurso de democracia, intimidando a potencias opositoras a partir de dos elementos; las presiones económicas y la guerra (directa o indirecta). Apoyado por organizaciones maniqueas como la ONU, OEA o la OTAN por medio de lo cual la mayor de las veces impone su voluntad con el fin de sacar partido y ventaja comercial de ello. Uno de los principales elementos que mueve a su economía de manera es la industria armamentista, así ha sido desde mediados de siglo XIX y lo es hasta ahora, baste mencionar la operación “Rápido y Furioso” en nuestro país durante el sexenio de Felipe Calderón.
La sobreproducción de armas es la explicación clara del porque son los principales incitadores de conflictos mundiales “las armas llevan paz y libertad” ¿No? Pero no es suficiente con desahogar el mercado mundial sino incitarlo y legitimarlo al interior. Para ello se han valido de la Segunda Enmienda de su Constitución la cual señala textualmente “Siendo necesaria una milicia bien organizada para la seguridad de un Estado libre, el derecho del pueblo a poseer y portar Armas, no será infringido”
Bajo esta premisa y ante el temor de una reconquista continental por parte de las potencias europeas decimonónicas (España, Francia y Gran Bretaña), se funda diez años después de la Guerra Civil Estadounidense (Guerra de Secesión, 1861-1865) la Sociedad Nacional del Rifle en 1871 (NRA, National Rifle Association of America, por sus siglas en inglés) de la cual han formado parte desde actores, políticos, deportistas hasta ex presidentes como el citado ex presidente al principio Ulysses S. Grant que además fue presidente de dicha organización en sus inicios y que actualmente cuenta con una membresía que asciende a los 5 millones en toda la unión americana.
Otro de los ex presidentes que es miembro de número es Donald Trump, quien durante su mandato fue su ferviente promotor. Cosa curiosa es que dicha organización fue una de las empresas que financiaron su campaña electoral por lo tanto, la propaganda de Trump a la Segunda Enmienda y a la NRA aderezada de discursos supremacistas no fue gratis sino un toma y daca político. Cabe señalar que esta empresa gasta millones anualmente tanto en propaganda como en programas, torneos y concursos de tiro con los que intenta justificar y disfrazar sus oscuros objetivos.
Suena increíble e irónico que un país que se jacta de ser el gendarme del mundo sea el que tiene la mayor tasa anual de agresiones y muertes por armas; peor y más vergonzoso que en un país de primer mundo sea más fácil comprar dos cosas; drogas y armas, y dejar para después el rescate económico de su sociedad vulnerable. Sobre todo en momentos en los que los estragos de la pandemia de covid-19 siguen estando latentes.
Cuestiones como esta han trastocado a la sociedad estadounidense la cual poco a poco se ha dado cuenta que el poder que tiene la NRA están minando a una sociedad cada vez más colapsada por la esquizofrenia y la crisis que por enemigos reales. Así lo entendió la sociedad civil cuando alzó su voz como nunca en 2018 a raíz de la masacre acontecida en aquel año. Desde entonces un sector consciente del grave peligro que tiene la no regulación de armamento entre sus ciudadanos ha alzado la voz, la mayor de las veces sin un eco favorable. En tanto el mercado de las armas siga siendo un negocio jugoso para republicanos y demócratas, ni su país ni el mundo entero tendrá sosiego ante estos señores de la guerra y muerte.
Al final de esta nota otros hechos de sangre impactan al mundo; muere en Japón el ex primer ministro Shinzo Abe. En México fallece a los cien años el ex presidente Luis Echeverría Álvarez. El primero es ultimado con un arma casera tras terminar de dar un discurso; el segundo muere en la infamia e impunidad con las manos manchadas de sangre tras las represiones y matanzas que incitó durante su mandato en la década de 1970 (Halconazo).
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